El hecho ocurrió en un colegio de San Pablo, Brasil, que admite a estudiantes que tienen problemas de audición. Una docente, en una clase de lengua de señas descubrió algo extraño en una niña de 13 años que había ingresado a la escuela bajo custodia de un pastor, que se presentó desde el primer día como responsable de ella. Tras formar un vínculo especial con la niña, la maestra descubrió que la joven era abusada por aquel hombre que decía cuidarla

"Soy pastor y me ocupo de los intereses de la familia de ella. Hablo porque quiero que me digas si algún niño se le acerca. Quiero saber si hay un niño que le envía una carta, esas cosas. Como ella fue abusada en otra escuela, tengo esta preocupación", reveló la docente de la chica a la BBC al contar cómo se presento el hombre en 2016, año donde ingresó la niña a la escuela. 

Según ella, descubrir lo que sucedía era cuestión de ver las señales. Expertos en educación y psicología infantil dicen que esa actitud es esencial para descubrir el abuso. "Era una adolescente muy hermosa. Llamó mucho la atención de los chicos, pero debido a que es sorda y que estaba en un ambiente mayoritariamente auditivo, tuvo una mayor apertura con el intérprete, que necesita tener esa sensibilidad y construir un vínculo de confianza con el alumno", reveló.

En primera instancia la niña no reveló toda la información. Al principio fue interrogada por sus reiteradas ausencias, las cuales justificó diciendo que se iba a las ceremonias religiosas de su Iglesia, donde el hombre que la cuidaba era pastor. Cuando tuvieron más confianza, la niña le preguntó a la maestra qué pensaba de un hombre que tiene una relación con una menor. Julia recordó que ella dormía en la casa del pastor.

Al instante ella alertó al director de la escuela y descubrieron que el documento de tutela que el pastor había entregado en la escuela era falso. Convocaron entonces al Consejo Tutelar y se llamó a la madre de la niña. Según Julia, ésta se indignó por la denuncia y la agredió.

Por su parte, la niña también negó todo a la policía, pero le hicieron un examen físico ese mismo día y se encontraron signos de violación. Por unos días, Julia no regresó a la escuela y el caso se sigue investigando. Según profesionales en psicología y casos de abuso, el papel de la escuela es muy importante para identificar cada caso.