Algunos dicen que para el amor no hay edad y hay personas que esto lo atestiguan con hechos y palabras, como el caso de una abuela de 85 años, quien lejos de estar sentada todo el día o encerrada en su casa, utiliza la red social para citas Tinder para buscar “un joven amante para una vida llena de aventura y pasión”.

Según contó la propia Hattie Retroage (oriunda de la ciudad de Nueva York), ella tiene mucho éxito en esta conocida aplicación de citas: mantuvo cincuenta encuentros con hombres y, entre ellos, uno de 19 años. "El objetivo de mi vida es cambiar la visión horrible y decrépita del envejecimiento, y convertirla en algo emocionante”, sostuvo en Barcroft TV.

"Hago el amor con muchos hombres, lo hago muy bien, pero ninguno ha dicho: 'Te quiero para mi vida'. Eso es buenísimo... solo quiero aventura y pasión", agregó la anciana.

Divorciada en 1984 (estuvo casada durante 25 años), esta ex bailarina descubrió  Tinder a principios del 2019 y su perfil decía: "Fascinante belleza de avanzada edad busca un estable y joven amante para una vida llena de aventura y pasión. No pro-Trump ni 'jugadores'”.

Tinder: ¿Cuáles son sus reglas?

Cuando se da el "match", para Hattie hay ciertas reglas a seguir al momento de la cita con un hombre. "Les digo de antemano que tengo que reunirme con ellos para ver si hay química. Entonces salimos a tomar un trago, y si la química es correcta, vamos a mi departamento. Sino, cada uno se va por su lado", le contó a Daily Star.

Consultada sobre cómo toma su familia todo esto, Retroage contó que Rama, su hija de 53 años, no tuvo problemas en aceptar esta faceta de su madre, pero que Josh, su hijo de 57, tiene algunas reservas. "El y su esposa lo odian. Ellos tienen dos hijos en edad escolar, y no los dejan leer sobre las cosas que hago", reconoció.

“Estoy agradecida de que a esta edad y esta etapa tenga tantos amantes como quiera. No puedo evitar la profundidad de la vida. Pero la superficialidad del buen sexo, eso es lo suficientemente bueno para mí”, afirmó la abuela de Tinder.

En 2020, ante la enorme repercusión que tuvo su historia, la abuela de Tinder tuvo un aluvión de invitaciones y terminó conociendo a un hombre de 39 años con el que quiso tener una relación algo más profunda que un encuentro casual. Sin embargo, un año más tarde, Hattie se separó y también cambió de plataforma para buscar pareja: apuntó su rumbo hacia Bumble.

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"No estoy saliendo con nadie ahora. Publicaré en Bumble, ya que algunas amigas han conocido hombres allí", aseguró en julio pasado al diario The Sun. "¡Comenzaré a tener citas nuevamente ahora que puedo tener intimidad y disfrutaré haciendo el amor nuevamente! (a los 85!)".

"Estoy encantada de que mi estilo sexual esté cambiando el rumbo. No son solo los hombres viejos los que pueden disfrutar de mujeres jóvenes, ¡estamos cambiando el rumbo!", afirmó la mujer.

En su juventud fue bailarina y coreógrafa, pero ahora trabaja como coach sexual y escritora.
"Trabajo con personas que buscan asesoramiento sobre sexo y envejecimiento sin filtros. Soy una sexóloga con licencia destacada internacionalmente para inspirar a mujeres de todas las edades a amar y respetar su sexualidad única".

A su vez, está trabajando en un libro, Cougar Chronicles, para inspirar a las mujeres mayores a disfrutar de los jóvenes (y viceversa). "¿Qué consejo puedo dar? El consejo que le doy a la gente es que se masturben, por el amor de Dios. Debes mantener el motor en marcha, te apetezca o no... Mantenlo vivo".

A Hattie también le encanta el contenido para adultos y en cuanto a su físico contó que toma clases de natación y fitness para mantenerse en forma. A su vez, se mantiene con un régimen increíble que consiste en levantar una pelota medicinal de 5 kilos, rodarla sobre su estómago y luego golpearla contra su pecho.

"Mi balón medicinal ha sido mi compañero más cercano durante 35 años. Prepara mi cuerpo para el impacto. Es genial para el sexo porque significa que tu cuerpo puede soportar mucho de lo que sea".

Cuando le preguntan por qué busca hombres más jóvenes, ella niega que sea por algo relativo al sexo, sino por la actitud: "Un joven está entusiasmado con lo que depara el futuro y puedo mantener ese fuego encendido".