Un sismo de 7,1 grados en la escala abierta Richter sacudió este sábado la costa de Fukushima, ubicada en el este de Japón. El terremoto se notó con fuerza en Tokio, sin que las autoridades locales activaran por el momento la alerta de tsunami. 

El epicentro estuvo ubicado a unos 60 kilómetros de profundidad frente a la costa de la prefectura de Fukushima, según informó la Agencia Meteorológica de Japón. La cadena estatal NHK informó que por el momento hay al menos 10 heridos en Miyagi y 8 en Fukushima, alrededor de 820 mil hogares se han quedado sin suministro eléctrico y otros 70 mil sin agua.

El terremoto levantó diez metros de una importante autopista en la prefectura de Fukishima, que se encuentra bloqueada por un derrumbe.

En Fukushima y Miyagi, sobre la costa noreste de Japón, el terremoto llegó al nivel seis en la escala nipona, que tiene un máximo de siete y se centra más en las zonas afectadas que en la intensidad del sismo. El temblor también sacudió otras prefecturas de la costa oriental y del centro de Japón, entre ellas la capital Tokio, que alcanzó el nivel 4 de la escala japonesa.

La Agencia Meteorológica de Japón afirmó que el terremoto podría causar una leve crecida del nivel del mar, aunque aún no se activó la alerta de tsunami. Sin embargo, a modo de precaución, aconsejó a quienes se encuentren cerca de las zonas costeras lindantes que se trasladaran a terrenos más altos dado que las réplicas pueden continuar.

Takashi Furumura, profesor en el Instituto de Investigación de Terremotos en la Universidad de Tokio, adivrtió que un sismo de esta magnitud podría ser precedido por otro de escala similar en los próximos dos o tres días. 

Según la cadena estatal NHK, desde el Ejecutivo se ha conformado un equipo de emergencia para recolectar la información disponible y analizar la situación. Además, las empresas energéticas con centrales nucleares en la zonas afectadas comprueban si se han producido daños en sus instalaciones.

En 2011, esta misma zona fue epicentro de la mayor catástrofe natural de la historia reciente del país cuando un terremoto de magnitud 9 y su posterior ola gigante dejó más de 15.000 muertos y desató una crisis radiactiva nunca antes vista en la central nuclear de Fukushima.