Una terrible situación atraviesan dos nenes en México, conocidos con los nombres ficticios de Laura, quien tiene 12 años, y Pedro, su pareja, de 15. Ambos acaban de convertirse en padres y deben afrontar la vida casi en soledad, ya que se fueron a vivir juntos cuando, al parecer, sus familias los abandonaron al inicio del embarazo.

Esta aberrante situación ocurrió en la comunidad de Santa María Ajoloapan, uno de los pueblos originarios del municipio de Tecámac, en el estado de México. Por eso, armaron su humilde vivienda con cuatro tablas de madera. El piso aún es de tierra. Allí estos niños deben vivir junto a su pequeño hijito, que nació prematuro, de ocho meses.

Según contó la alcaldesa Mariela Gutiérrez Escalante, la chiquita entró en trabajo de parto justo cuando terminaba la visita de empleados del ayuntamiento, por lo que ellos mismos la ayudaron a trasladarse hasta un hospital para que el bebé naciera con asistencia de los médicos.

"A la niña se le rompió la fuente teniendo un embarazo de ocho meses, justo después de que fueron visitados por empleados del ayuntamiento, quienes los apoyaron para que su bebé naciera en un hospital", comentó la funcionaria. Por parto normal nació un varón que midió 50 centímetros y pesó 3,200 kilos.

Un futuro incierto

Lo que vendrá para esos chicos aún es incierto. Por un lado, podrían recibir ayuda oficial, por lo que les brindarían asistencia médica, psicológica, social y económica. Además, trascendió que ahora los padres de ambos anunciaron que estarán atentos a ellos y dispuestos a supervisar el estado de los tres.

No obstante, defensores de los derechos de los niños reclamaron que se inicien acciones legales contra los padres de Laura y Pedro por negligencia y abandono infantil.