Si hay algo que dejó el paso del coronavirus (Covid) por el mundo es muerte, desolación y angustia, aunque hay casos es que la noticia puede ser doblemente destructiva.

Este es el caso de Graeme Carling Jr, quien perdió a sus padres, Graeme y Margaret Carling, un matrimonio de 65 años que murió de Covid en distintos hospitales, pero con apenas una hora de diferencia.

El hijo de la pareja confesó que se puso "completamente blanco" cuando recibió una llamada que le informaba que su padre había fallecido en el Hospital Ninewells, en Reino Unido.

Sucede que el joven viajaba a su casa desde Roxburghe House, una unidad especializada en cuidados paliativos, después de haber despedido a su madre Margaret, quien había fallecido también por Covid.

"Recibí una llamada telefónica de mi hermana a las 6 de la tarde diciendo que nuestra madre estaba mal. Me apresuré y minutos después falleció. Fue horrible y triste", dijo Graeme Jr.

Sin embargo, cuando caminaba por el pasillo de la Casa Roxburghe volvió a sonar su teléfono. El llamado provenía desde el Hospital Ninewells. "La enfermera me preguntó si era un buen momento para hablar. Le dije que mi madre acababa de morir, pero que aún quería saber sobre mi padre", sigue con el relato.

Ella le informó que el hombre se encontraba dentro de todo bien y que parecía que el oxígeno estaba funcionando, y que aunque tenía una alta dependencia, podía respirar por sí mismo.

El joven se mantuvo tranquilo y le pidió a su esposa Leanne que condujera hasta un lugar tranquilo. Tenía la necesidad de parar, despejarse, ordenar sus pensamientos tras el doloroso episodio con su madre, pero durante el camino el celular volvió a sonar. Era nuevamente la enfermera, pero esta vez con la peor noticia. 

"Ella dijo 'Lo siento mucho, pero cuando volví a la sala, tu padre había fallecido'. Me puse completamente pálido. Pensé que esto no podía estar pasando", dijo el joven.

“Estuve en shock durante un par de meses. Fue mi peor pesadilla y de la nada", afirma quien también debió acompañar a sus hijos Mitchell (13) y Blaire (10) luego del duro golpe de perder repentinamente a sus abuelos.

"Cuando llegamos a casa, los niños esperaban que les contara sobre mi madre, pero luego tuve que decirles que su abuelo también había fallecido", sostuvo todavía sin creer lo sucedido.

Covid: llamada que llegó tarde

Al día siguiente de la muerte de su madre, un mensaje de texto llegó a su teléfono celular pidiéndole que organizara su vacunación contra Covid.

"Obviamente todo ha sido difícil. Eran jóvenes. No debían irse todavía, no tenían que morir. Pero lo hicieron", reflexionó el hijo, que pese querer "esconderse bajo las sábanas" debió seguir al frente de su negocio de construcción.

Diagnósticos de Covid

Margaret, de 65 años, había sido diagnosticada con Covid justo después de Navidad, y pese a principio de 2021 solo le habían dado 24 horas de vida, luchó contra la enfermedad.

Mientras tanto, su esposo ingresó en el Hospital Ninewells luego de sufrir un fuerte dolor de cabeza. Dio positivo por el coronavirus, pero pareció responder bien al tratamiento con oxígeno.

Dos días antes de su muerte, Margaret fue trasladada de Ninewells a Roxburghe House en el Royal Victoria Hospital, y a sus hijos Graeme y Michelle se les permitió visitarla.

La familia cree que Margaret se contagió durante su primera estadía y luego se lo pasó a su esposo.