Una joven británica vivió una situación terrorífica cuando se sacó una selfie estando sola en su casa de la ciudad inglesa de Barnsley.

Todo sucedió mientras Kelly Green, la protagonista de este hecho inexplicable, estaba chateando con sus amigos y les mandó una foto de su hogar.

Quienes recibieron la imagen de esta chica de 25 años se vieron anodadados por la presencia de una niña detrás de ella y le preguntaron preocupados al respecto.

Totalmente en pánico, Green le explicó a sus contactos de Snapchat que no había nadie con ella y que estaba "atónita" por su descubrimiento.

Esta es la foto original

"Mi padre me dijo que podría ser su hija, la que murió por un aborto espontáneo. Perdieron un bebé antes de que yo naciera y la llamaron Jessica. Está orgulloso y feliz de ver la figura", les confesó Green.

Otros consideraron que se trató de un fenómeno psicológico llamado paridolia, que es cuando uno creer que vio un objeto que no existe como una forma reconocible. 

Algunos usuarios opinaron al respecto y fue más allá y valoraron las imagen de la pequeña como algo "fantasmal".

El macabro detalle del que todos hablan.