Un sacerdote con más de dos décadas de servicio en múltiples congregaciones renunció "con un corazón apesadumbrado", luego de descubrir que llevaba toda su vida realizando bautismos de manera incorrecta. La equivocación del padre Andrés Aragno, según informó la Diócesis de Phoenix, Estados Unidos, afectó a miles de creyentes.

"Es con sincera preocupación pastoral que informo a los fieles que los bautismos realizados por el Reverendo Andrés Arango, un sacerdote de la Diócesis de Phoenix, no son válidos", dijo Thomas Olmsted, obispo de la Diócesis de Phoenix, describiendo la revelación como "tan difícil de escuchar como desafiante para para anunciar".

Los problemas surgieron cuando se descubrió que el sacerdote Arango estaba usando la fórmula incorrecta para el bautismo. Según comunicó la diócesis a la comunidad afectada, el padre decía "nosotros os bautizamos en el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo", cuando la tradición indica decir "yo" en lugar de "nosotros".

"No es la comunidad la que bautiza a una persona y la incorpora a la Iglesia de Cristo; más bien, es Cristo, y solo Cristo, quien preside todos los sacramentos; por lo tanto, es Cristo quien bautiza. La Fórmula Bautismal siempre fue guardada por esta razón: para que quede claro que recibimos nuestro bautismo a través de Jesús", fue la explicación que dio la Iglesia. Katie Burke, vocera de la Diócesis de Phoenix, le dijo a Newsweek que si bien la diócesis no tiene una cantidad exacta de bautismos inválidos que realizó Arango, la cantidad es "de miles".

Ni primera, ni segunda, ni tercera comunión

El vaticano emitió un comunicado universal para que sus diócesis estén atentas a casos similares.

Uno de los aspectos más preocupantes de este escenario es la forma en que un bautismo inválido afecta a los demás sacramentos. Pius Pietrzyk, sacerdote y abogado canónico, explicó al medio local Aleteia: "El bautismo es la puerta de entrada a la Iglesia; sin el bautismo uno no es cristiano. Por ser el primer sacramento, es necesario para todos los demás sacramentos. Entonces, si han intentado otros sacramentos como la confirmación o el matrimonio, esos no son válidos".

El obispo Olmsted garantizó en una carta donde comunicó el duro anuncio que, "en nombre de nuestra iglesia local, yo también lamento sinceramente que este error haya resultado en la interrupción de la vida sacramental de varios fieles. Es por eso que me comprometo a tomar todas las medidas necesarias para remediar la situación de todos los afectados".

Eso incluye ofrecer a los miembros de la diócesis información sobre los antecedentes de la situación, así como la posibilidad de programar otro bautismo para que los feligreses estén seguros de que el sacramento es válido.

Decenas de fieles adultos ya se acercaron a la Iglesia en Phoenix para reafirmar su fe. (Imagen ilustrativa)

Mientras que el padre Arango renunció como párroco de su parroquia, todavía se le considera un sacerdote con buena reputación en la Iglesia. Está trabajando en estrecha colaboración con la diócesis para identificar a todos aquellos para quienes realizó bautismos inválidos.

En una carta de disculpa proporcionada por la Diócesis de Phoenix, escribió: "Me entristece saber que realicé bautismos inválidos a lo largo de mi ministerio como sacerdote. Lamento profundamente mi error y cómo esto ha afectado a numerosas personas en su parroquia y en otros lugares. Con la ayuda del Espíritu Santo y en comunión con la Diócesis de Phoenix, dedicaré mi energía y mi ministerio a tiempo completo para ayudar a remediar esto y sanar a los afectados".