Pibes escaparon de un restaurante sin pagar la cuenta y arrastraron seis metros a empleado que quiso detenerlos
Se trata de un grupo de adolescentes que huyeron de un local gastronómico en Santa Clara, California, al ver el ticket de lo que habían consumido. En la fuga, los jóvenes hirieron gravemente a uno de los mozos. Mirá las imágenes.
Un grupo de adolescentes se escaparon a toda velocidad con su auto y arrastraron a un empleado de un restaurante coreano en Santa Clara, California, en Estados Unidos, luego de que se negaran a pagar la cuenta de lo que habían consumido. En el medio del conflicto, uno de los mozos resultó herido en sus brazos y piernas al perseguir a los menores de edad y al haberse aferrado al coche hasta que se pudo soltar a los seis metros desde donde habían partido los jóvenes acusados.
Afortunadamente, las cámaras de seguridad del local gastronómico, llamado Pocha K, grabaron el momento del ataque y, gracias a las imágenes, usuarios de las redes sociales pudieron identificar a los seis jóvenes agresores, quienes finalmente fueron arrestados por la Policía local.
Por su parte, el mozo herido fue identificado como Kyung, quien heroicamente persiguió a los adolescentes e intentó persuadir de que pagaran el monto del ticket que ascendía a unos 120 dólares, según informó la periodista Dion Lim en Instagram (@dionlimtv).
James, el propietario del restaurante Pocha K, celebró que los usuarios de las redes hayan podido identificar a los seis chicos y aseguró que los padres ya les pagaron el dinero de la cuenta, más los gastos ocasionados por las heridas de Kyung (catalogadas como “graves”) y también acordaron pagar los daños materiales que sufrió el negocio.
La madre de uno de los adolescentes regresó al restaurante y pagó 400 dólares. Pese a las disculpas y explicaciones que dieron los jóvenes, tanto James y Kyung tenían mucho en qué pensar, ya que estaban dispuestos a denunciar a los jóvenes ante las autoridades.
Sin embargo, James dijo que, como padre, empresario y ser humano, quiere creer que estos adolescentes aún pueden cambiar para mejor y que arrestarlos “los perseguirá para siempre”.
Finalmente, el dueño del restaurante, los adolescentes y sus padres discutieron una posible compensación por las facturas médicas de Kyung, quien todavía piensa en que lo mejor sería acusar a los adolescentes.
Cada uno de los chicos realizó una pancarta en la que pidieron perdón a James y Kyung por los disturbios ocasionados. Dichos carteles fueron difundidos en las redes sociales y no tuvieron mucha aceptación por parte de la opinión pública, que todavía piensa que lo mejor sería acusar formalmente a los agresores.
Los usuarios de Instagram comentaron el posteo de la periodista, y se quejaron del accionar de los jóvenes y consideraron que deberían hacer un cartel de disculpas públicas, peros desde un “carnet de la cárcel”. Otro usuario dijo que no deberían ocultar los rostros de los acusados menores de edad ya que “tienen edad suficiente para enfrentar consecuencias”. "¡Revelen sus rostros y presenten cargos! Los niños no aprenderán si sus padres los están encubriendo", comentó otra persona en esa red social.