La llegada de Lionel Messi a la capital francesa causó un furor sin precedentes. La "messimanía" copó las calles de París, con cientos de personas agrupadas en los diferentes puntos que visitó el delantero argentino durante su introducción oficial al París Saint Germain (PSG). En el medio de la vorágine que fue dejar el Barcelona, un pedazo de casa espera a Messi en el corazón de la ciudad de las luces.

Se trata de la parrilla Volver, que deleita a los franceses con asados compuestos por auténticos cortes argentinos, importados para representar al país en el Viejo Continente. Su fundador, Carlos Muguruza, recibió en su mesa a decenas de los más grandes deportistas argentinos, pero espera hace años el encuentro con el 10. Ahora que se reubicó a París, a Messi lo espera con la mesa ya servida.

"La carne argentina es de otro planeta, como Messi. Le estamos esperando a Leo que venga a comer. Vamos a tener que armarle un plato. Ya tengo la mesa reservada para él con una camiseta que me firmó cuando estaba en Barcelona", contó a Clarín el chef argentino ubicado en Francia, que abrió la parrilla por sus propias ganas de disfrutar de un buen corte de carne.

Luego de seguir a Europa a su mujer, una bailarina del Teatro Colón que fue ofrecida un lugar en la Ópera de París, Muguruza comenzó a extrañar la carne argentina. Lejos de casa, ni siquiera una de las capitales gastronómicas del mundo lograron satisfacer su paladar. Fue entonces que decidió resolver él mismo el problema, abriendo las puertas de la parrilla Volver.

La parrilla Volver es también el consulado oficial de Boca Juniors en Francia.

Cocinamos como en argentina y a eso la gente le gusta. Le sumamos papas fritas, chimichurri, ensaladas, provoleta, empanadas, todo bien argento”, dijo Muguruza. Y no es sólo la composición la que es auténtica: los cortes de carne servidos en Volver son parte de la cuota Hilton, de la más alta calidad, importados por la Asociación Argentina de Angus. Para coronar, el vino es también importado de las viñas nacionales.

El asado de Muguruza es disfrutado por clientes franceses en busca de carne de buena calidad, pero también se convirtió en el favorito de los atletas argentinos ubicados en la ciudad. Primero fueron Javier Pastore y Ezequiel Lavezzi, y después les siguieron Ángel Di María, Leandro Paredes, Mauro Icardi y muchos más. Pero la visita de Messi es con la que Muguruza sueña.

Muguruza junto a los jugadores argentinos del PSG y sus respectivas parejas.

Ese día habrá que cerrar no solo el restaurante para él, sino también el barrio, como cuando viene el presidente Emmanuel Macron por la zona”, afirmó a La Nación el chef argentino, que ya prepara el ojo de bife a punto bleu chaud, su plato estrella, para la llegada del astro rosarino.