Un trágico caso de negligencia tuvo lugar en la localidad portuguesa de Almada, donde una beba de un año murió este martes tras pasar varias horas encerrada en el coche de su padre, que se habría olvidado de dejarla en la guardería y se fue directamente a su trabajo, según fuentes de los Bomberos Voluntarios de esa ciudad.

El asunto es que la niña fue encontrada por el padre en el coche que había dejado aparcado en el campus de la Facultad de Ciencias y Tecnologías, donde trabajaba, indicaron a EFE las mismas fuentes.

Tras dar el alerta, los equipos de emergencias médicas acudieron a la facultad pero sólo pudieron certificar la muerte de la bebé, sobre las 15.30 hora local.

Las primeras informaciones apuntan a que el padre se habría olvidado de dejar a la infante en la guardería de la facultad, y se fue a trabajar sin darse cuenta de que la niña seguía en el coche.

Contención psicológica

Tras el terrible momento sufrido, los padres de la pequeña víctima están recibiendo apoyo psicológico y el caso está en manos de la Policía Judicial de Setúbal, según lo consignaron medios locales. 

Hay que resaltar que el pasado verano se dio un caso similar en la localidad española de O Porriño (región de Galicia), cuando una madre dejó durante seis horas a su hijo en un vehículo cerrado. El pequeño tenía tres años y murió por un golpe de calor, en tanto, la madre fue a trabajar pensando que le había dejado en la guardería.