Las redes de los arcos se encuentran de luto y es que en las últimas horas se anunció la muerte del legendario arquero mexicano Antonio "Tota" Carbajal, quien fue el primer futbolista que jugó cinco mundiales de la FIFA, y dejó de existir en la ciudad "azteca" de León.

"Se puso malito la semana pasada, le hicieron un chequeo, estuvo en el hospital y pasó el fin de semana en su casa. Lamentablemente hoy martes por la mañana su cuerpo no aguantó más y así terminó la vida de la 'Tota'", informó a la AFP Antonio Moreno, director del Salón de la Fama del Fútbol Internacional, avalado por la FIFA.

"Antonio Carbajal es un ícono del fútbol mexicano y mundial porque, efectivamente, fue el primer Cinco Copas y en las cinco estuvo en la cancha", añadió Moreno Zermeño, quien estuvo en constante contacto con el histórico futbolista y su familia.

Antonio Carbajal jugó los Mundiales de Brasil-1950, Suiza-1954, Suecia-1958, Chile-1962 e Inglaterra-1966. Posteriormente, igualaron su marca el alemán Lothar Matthaus, el italiano Gianluigi Buffon, el argentino Lionel Messi, el portugués Cristiano Ronaldo y los mexicanos Rafael Márquez, Guillermo Ochoa y Andrés Guardado.

Antonio Carbajal: trayectoria futbolística

Nacido el 7 de junio de 1929 en Ciudad de México, Antonio Carbajal jugó en la primera división del fútbol azteca entre 1948 y 1966 para los equipos Real España y León.

Con la selección mexicana jugó 47 partidos entre 1950 y 1966; asistió también a los Juegos Olímpicos de Londres-1948, pero no jugó.

Antoni Carbajal, una eminencia en el arco "azteca" (Archivo).

Después de su retiro como jugador, fue director técnico en primera división de Unión de Curtidores, León y Morelia. También fue comentarista de televisión en varias Copas del Mundo.

Ya alejado del fútbol profesional, en la ciudad de León, Guanajuato, realizó una labor social con niños en condiciones de vulnerabilidad en un centro de rehabilitación llamado "La Búsqueda".

"En los últimos años de su vida, ya rebasando los 80 años, se dedicó a ayudar y aconsejar niños de bajos recursos, con problemas familiares y de drogadicción; les daba charlas, organizaba partidos de fútbol y eso lo mantenía todavía emocionado en sus últimos años", contó Antonio Moreno.