El Reino Unido este martes quedó a poco de llegar al cuarto de millón de infectados de coronavirus y el gobierno recibió críticas por su gestión de la pandemia, tras conocerse que más de 11.600 personas murieron en los geriátricos por esa enfermedad.

En tanto, las autoridades instaron este martes a los ciudadanos a colaborar con el sector agrícola para compensar la falta de los inmigrantes que solían realizar esas labores y al mismo tiempo dar respuesta al creciente desempleo.

El país registró en las últimas 24 horas 2.412 contagios y 545 muertes por coronavirus, lo que elevó el total a 248.818 casos confirmados y 35.341 fallecimientos, informó el Ministerio de Ambiente, George Eustice, en conferencia de prensa.


La cantidad diaria de decesos contrasta con los 170 del domingo y los 160 del lunes. 

Mientras tanto, el ONS, el instituto de estadística británico, estimó que las víctimas fatales son poco más de 39.000 contando hasta el 8 de mayo sólo en Inglaterra y Gales, informó la agencia de noticias EFE.

El gobierno del primer ministro conservador Boris Johnson volvió a recibir críticas por su plan de reapertura.

El ministro de Salud, Matt Hancock, fue interrogado este martes en el Parlamento tras informarse que más de 11.600 personas murieron en residencias para adultos mayores.

El Partido Laborista acusó al Ejecutivo de haber priorizado las medidas para descongestionar los hospitales en las primeras semanas de la crisis y haber actuado con "lentitud" para evitar contagios y muertes en centros sociales.


Hancock argumentó que si bien las muertes en esos centros pueden llegar a 27% de las totales, "hay que compararlas con la media europea, que está en torno a la mitad".

Care England, el órgano que agrupa a los gestores de centros sociales, sostuvo que la crisis se agravó al trasladar pacientes desde hospitales hacia residencias.

"Hemos seguido una política de vaciar hospitales y llenar las residencias; en algunos países, cuando las personas eran sintomáticas, se las sacaba de las residencias para aislarlas", argumentó el director ejecutivo, Martin Green.

Eustice defendió las decisiones de Johnson y si bien aceptó que algunas personas asintomáticas "pudieron haber sido dadas de alta", afirmó que la guía de alta para los hogares de ancianos se "fortaleció" y manifestó que no aceptará que los ministros "hayan tomado un enfoque equivocado".


En medio de la crisis sanitaria, el país también sufre las repercusiones económicas de la pandemia, por lo que el ministro instó a los ciudadanos a unirse a la campaña lanzada por el gobierno y el sector agrícola, "Pick for Britain" (Cosechá para el Reino Unido).

Eustice explicó que “sólo un tercio de los recolectores de frutas y verduras que generalmente vienen al Reino Unido desde Europa vinieron este año”, aunque no explicó si eso se debió a la pandemia o al Brexit.

Asimismo, añadió que el gobierno quiere que los británicos, especialmente aquellos con licencia de sus trabajos habituales, tomen estos trabajos y “echen una mano” de cara la cosecha de frutas y verduras de este verano.


El mensaje estuvo dirigido sobre todo a los cerca de ocho millones de trabajadores que tienen el empleo suspendido temporalmente y se encuentran bajo el plan de protección gubernamental que cubre 80 % de sus sueldos, hasta 2.500 libras.

Casi 2,1 millones de personas reclamaron las ayudas por desempleo sólo en abril, el mismo mes en que las ofertas de empleo cayeron hasta 350.000, un dato que comparado con las 750.000 de marzo da muestra del peor mes de la crisis económica en el último decenio.