Jair Bolsonaro se convirtió en noticia a nivel mundial este domingo. ¿El motivo? Ni más ni menos que un golpe de sus militantes al Congreso de Brasil. Por eso, tras casi poco más de ocho horas de silencio, rompió el silencio y se expresó al respecto de tamaño acontecimiento.

"Las manifestaciones pacíficas, en forma de ley, son parte de la democracia. Sin embargo, las depredaciones e invasiones de edificios públicos como las ocurridas hoy, así como las practicadas por la izquierda en 2013 y 2017, escapan a la regla", escribió en sus cuentas de redes sociales.

Por otra parte, Bolsonaro remarcó: "A lo largo de mi mandato siempre he estado dentro de las cuatro líneas de la Constitución, respetando y defendiendo las leyes, la democracia, la transparencia y nuestra sagrada libertad".

Asimismo, el otrora mandatario se despegó de quienes lo vincularon como autor material de esta intempestiva intromisión dentro de los pasillos del Recinto. "Además, repudio las acusaciones, sin pruebas, que me atribuyó el actual jefe del ejecutivo de Brasil", concluyó.

Ataques de los militantes de Bolsonaro en Congreso de Brasil

Los miles de seguidores del ex mandatario de Brasil que invadieron este domingo el Palacio del Planalto, el Congreso Nacional y el Supremo Tribunal Federal, en Brasilia, provocaron cuantiosos daños.

Dentro de los predios de los tres poderes, muebles y obras de arte fueron destruidos, según se pudo ver en la cobertura de medios locales, así como en material audiovisual publicado en redes sociales.

En un video publicado en la red social Twitter, un manifestante sostenía una puerta del despacho de uno de los integrantes del STF y titular del Tribunal Superior Electoral (TSE), Alexandre de Moraes, uno de los principales destinatarios de los insultos y críticas de Bolsonaro.

Tensión en el Congreso

El mandatario argentino Alberto Fernández repudió "el intento de golpe de Estado" en Brasilia. Asimismo, como presidente pro tempore de la CELAC y el Mercosur, llamó a los países miembros a unirse "en esta inaceptable reacción antidemocrática que intenta imponerse en Brasil".

Gustavo Petro —presidente de Colombia—, expresó que “el fascismo” decidió “dar un golpe” en el país sudamericano y subrayó que “es hora urgente de reunión de la OEA (Organización de Estados Americanos) si quiere seguir viva como institución".

Por otra parte, organismos y sindicatos también expresaron su repudio a lo acontecido en el país vecino. La Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (FAECYS), a través de su Secretario General Armando Cavalieri, manifestó su enérgico repudio a las manifestaciones y acciones violentas que atentan contra la democracia y la voluntad popular en Brasil. 

Al mismo tiempo, Cavalieri expresó su total solidaridad y apoyo al presidente Lula da Silva y al pueblo brasileño.