En una iniciativa que busca abordar la desigualdad económica a nivel mundial, más de 20 ex presidentes y primeros ministros del G20 y países de mayores ingresos solicitaron a los actuales líderes del G20, incluyendo a Joe Biden, Olaf Scholz y Keir Starmer, que apoyen un nuevo acuerdo global para imponer un impuesto a los individuos ultrarricos. Actualmente, estos individuos pagan entre el 0% y el 0,5% de su renta en impuestos.

El pedido se realizó a través de una carta abierta publicada recientemente, coordinada por el Club de Madrid y Oxfam, en la cual se advierte que “la proporción de ingresos del 1% de los que más ganan ha aumentado un 45 por ciento en cuatro décadas, mientras que las tasas impositivas máximas sobre sus ingresos se redujeron en aproximadamente un tercio”.

La propuesta de Brasil, apoyada por estos exlíderes, busca que los milmillonarios paguen su “parte justa” de impuestos, lo cual reduciría la desigualdad y permitiría recaudar billones de dólares necesarios para inversiones en política industrial y una transición justa.

Esta medida afectaría a unos 3.000 milmillonarios, incluidos figuras como Elon Musk (Tesla), Jeff Bezos (Amazon) y varios empresarios argentinos como Marcos Galperin (Mercado Libre), Paolo Rocca (Techint) y Alejandro Bulgheroni (Pan American Energy).

Marcos Galperin, de Mercado Libre, sería un de los multimillonarios que tendría que pagar el impuesto.
Marcos Galperin, de Mercado Libre, sería un de los multimillonarios que tendría que pagar el impuesto.

Líderes mundiales que apoyan el impuesto a los ultraricos

Entre los firmantes de la carta se encuentran destacados líderes como la ex presidenta de Chile Michelle Bachelet, el ex Primer Ministro de Suecia Stefan Löfven, la ex Primera Ministra de Australia Julia Gilliard, el ex Primer Ministro de Francia Dominique de Villepin y el ex presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero.

Los exlíderes afirman que “la propuesta de Brasil para el G20 subraya la oportunidad de escribir una nueva historia sobre impuestos” en un momento en que “los multimillonarios, a nivel mundial, pagan una tasa impositiva equivalente a menos del 0,5 por ciento” de sus riquezas.

El gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil, que preside el G20 este año, también promueve este impuesto a los superricos. La carta de los ex jefes de Estado y de gobierno llega en medio de conversaciones en las capitales del G20 y precede una reunión de ministros de finanzas y banqueros centrales del G20 en Río de Janeiro, Brasil, el 25 de julio.

Países como Brasil, Sudáfrica, Francia y España ya han expresado su apoyo a este impuesto que prevé gravar el 2% de la renta de los superricos.

Michelle Bachelet, ex presidenta de Chile, apoya la iniciativa.
Michelle Bachelet, ex presidenta de Chile, apoya la iniciativa.

Stefan Löfven, ex Primer Ministro de Suecia y miembro del Club de Madrid, destacó: “La sensata propuesta de Brasil de establecer nuevos estándares globales para gravar a las personas más ricas es un punto de inflexión económico estratégico que todos los líderes del G20 deben respaldar”.

Michelle Bachelet sostuvo que la propuesta “es el tipo de política económica responsable que los gobiernos necesitan hoy”. “Al respaldar esta agenda, los líderes del G20 demostrarían que están asumiendo niveles oligárquicos de desigualdad extrema y el daño que esto genera a la democracia”.

La ex presidenta chilena concluyó: “Necesitamos un mundo en el que los más ricos paguen impuestos en todos los países y no se les permita dictar las reglas para su propio beneficio. Brasil nos está mostrando cómo”.

Los ex líderes mundiales también señalaron que “el capital global no respeta las fronteras nacionales” y que la acción nacional, aunque “indispensable”, solo puede llegar hasta cierto punto. Helen Clark, ex Primera Ministra de Nueva Zelanda, afirmó: “Esta última iniciativa tardó años en concretarse”.