Tras la finalización de la Segunda Guerra Mundial, cada nación europea se fue reconstruyendo a su manera, con diversos gobiernos y distintas situaciones, y en el caso de Polonia, tuvo que afrontar un fuerte socialismo por décadas. A todo esto, entre 1964 y 1970, tuvo que enfrentar la presencia de un brutal criminal que se llamó Zdzislaw Marchwicki, quien asesinó a 14 mujeres en distintas ciudades y fue conocido por la historia como "El Vampiro de Silesia".

Marchwicki nació en octubre de 1927 en el seno de una familia armada en rompecabezas, ya que su padre se casó cinco veces y tuvo cuatro hijos de sus diversos matrimonios, con lo cual no se sabe a ciencia cierta cómo fue la educación o la forma de vivir del futuro asesino con tantos hermanos y madrastras. A todo esto, se le suma su bajo interés en el estudio, con lo cual solo pudo cursar unos años en la escuela.

El tiempo fue pasando y poco se sabe de la vida de Zdzislaw, es decir, que paso con {él en la Segunda Guerra Mundial, sus trabajos y su cotidianidad, con lo cual ya hay que viajar hasta 1964, que es el momento en que comenzaron los crímenes en las regiones de Alta Silesia y Dabrowa, y que tuvieron su finalización en 1970 con un balance de 14 féminas muertas y otras 5 que salvaron su vida de milagro aunque resultaron heridas.

Primera muerte de la larga lista

El 7 de noviembre de ese año, Anna Mycek (15) fue encontrada muerta en Dabrowa, tras ser fuertemente golpeada en la cabeza, el asesino le quitó la ropa y dejó el cadáver tirado en una zona boscosa. Ese primer asesinato no arrojó ninguna prueba para que la policía polaca tenga certeza de quien estaba detrás del mismo.

Con el paso de los meses de 1965, se registraron más ataques y muertes, como Ewa Pakan que fue hallada en Czeladz, Lidia Nowacka en Bedzin e Irene Szymanska en la misma ciudad (aunque sobrevivió al ataque). Lo cierto, es que como las embestidas tuvieron lugar en la cuenca Dabrowa, al criminal se lo llamó "El Vampiro de Zaglebie" en ese comienzo.

Zdzislaw Marchwicki: ¿Cómo actuaba?

Cabe destacar, que el modus operandi del matador era el siguiente: elegía a una víctima, corría desde atrás hacia ella y la golpeaba con un objeto contundente en la cabeza hasta matarla, finalmente abusaba de la mayoría de los cuerpos, pero no los penetraba, ya que nunca se encontró esperma dentro de los cadáveres y esto dificultó la manera de identificar al presunto asesino.

A todo esto, la fiebre por la presencia del "Vampiro de Silesia" se extendió rápidamente y las mujeres de diversas localidades polacas tenían miedo de salir a la noche, por lo que los hombres solían acompañarlas hasta los lugares, además, varias mujeres fueron puestas como señuelo para atrapar al asesino, pero no tuvieron éxito.

Más muertes

A finales de 1965 se produjo la muerte de Jolanta Gierek cuyo cuerpo fue encontrado en el río Przemsza de la ciudad de Bedzin, sobrina de un importante funcionario del gobierno polaco, lo cual hizo que la búsqueda del criminal sea un "tema de estado" y sea declarado como el enemigo número 1 del país, Sin embargo, los cuerpos de Maria Gomolka y Jadwiga Sasiek, aparecieron tiempo más tarde y levantaron sospechas porque también tenían que ver con familiares involucrados en la esfera política de esa nación, con lo cual los investigadores creyeron que se trataba de hechos meramente políticos, aunque con el paso de los años se confirmó que fueron mera casualidad.

Tres años más tarde, las autoridades polacas decidieron pedir a la población que aporte todo tipo de información que pueda conducir hasta las puertas del criminal, pero muchos de esos datos eran falsos y no ayudaron en la investigación, con lo cual se pasó a otra fase, que fue la de entrecruzar datos, llamadas y características del asesino recopiladas y compararlas con los hombres que vivían en la zona de las muertes.

Ese importante descarte dejó en principio a más de 200 sospechosos en la mira, entre ellos a Marchwicki, y un nuevo rastrillaje de la policía puso entre los principales candidatos de las muertes al propio Marchwicki, aunque las pocas pruebas en su contra evitaron que sea detenido.

Lo cierto, es que el 4 de marzo de 1970, la maestra Jadwiga Kucianka fue encontrada muerta en Siemianowice Śląskie, y si bien, la policía tampoco pudo detener al autor del hecho, recibió una carta del mismo en la que decía que "ese iba a ser el último asesinato, que no habría más y que nunca lo capturarían".

Confesión y detención

A finales de 1971, la esposa de Marchwicki, María, se comunicó con la policía y dijo haber sido víctima de abusos al igual que sus hijos y que su marido era el "Vampiro de Silesia", esta situación desembocó en la detención del sujeto en los inicios de 1972 y sea llevado a un destacamento policial. Allí negó siempre su participación en las muertes, pero su conducta siempre fue extraña en los interrogatorios, lo que hizo sospechar a los investigadores.

Meses más tarde, los hermanos del criminal Henryk y Jan fueron detenidos por la policía como cómplices, situación que terminó siendo cierto para luego desembocar en la detención de su hermana Halina Flak y de su esposo Josef Klimczak.

Juicio y castigo

En tanto, tras dos años de investigación, el juicio comenzó a finales de 1974 en los Tribunales de Katowice en el cual se hizo tan mediático, que se vendían boletos al público para asistir al mismo. Casi un año más tarde, en julio de 1975, el tribunal decidió que Zdzislaw y Jan Marchwicki fueran condenados a muerte, Hnery a 25 años de prisión, Klimczak a 12, y Halina y Zdzislaw Flak a 4.

El 26 de abril de 1977, el famoso criminal polaco fue ahorcado en un garaje policial de Katowice, mientras que su hermano fue ejecutado minutos más tarde en otro lugar similar. En tanto, Henryk Marchwicki fue llevado a la prisión de Rzeszow para cumplir con sus 25 años de pena, Halina y Flack fueron liberados tras cumplir la sentencia y Josef Klimczak fue puesto en libertad en 1982 por el hacinamiento carcelario.

POR G.A.