Estados Unidos: así policías mataron a un afroamericano
Cada uno de los oficiales disparó al menos 7 rondas, unos 14 balazos en total, aunque todavía no se informó cuántos proyectiles impactaron en el cuerpo del hombre, informaron medios locales.
Autoridades del estado de Filadelfia publicaron videos de las cámaras corporales de dos de sus oficiales que muestran el momento en que mataron a tiros al afroamericano Walter Wallace Jr., el pasado 26 de octubre.
En las imágenes se puede ver cómo los policías se acercan a la casa del sospechoso, que aparece en la entrada con un cuchillo y luego camina rápidamente hacia los uniformados mientras una mujer, identificada en los medios como su madre, intenta detenerlo.
Se puede escuchar a los agentes gritando varias veces "baje el cuchillo" antes de que Wallace, de 27 años, reciba varios disparos. El joven cae al suelo y queda inmóvil, momento en que la mujer se acerca al cuerpo y lanza un objeto a los oficiales para mantenerlos alejados.
Cada uno de los oficiales disparó al menos 7 rondas, unos 14 disparos en total, pero la Policía no reveló cuántas balas alcanzaron al hombre, informan medios locales. Tras el tiroteo, Wallace fue trasladado a un hospital, donde falleció posteriormente.
Respuesta de las autoridades
La jefa de Policía de Filadelfia, Danielle Outlaw, declaró en una conferencia de prensa que la investigación del caso sigue su curso y afirmó que su departamento llevará a cabo algunas reformas tras el suceso. Además, identificó a los agentes involucrados como Sean Matarazzo, de 25 años, y Thomas Munz, de 26.
"Estos oficiales siguieron su entrenamiento y la política del departamento de Policía. Es completamente inapropiado que estos agentes continúen siendo vilipendiados por hacer su trabajo", afirmó por su parte el sindicato policial de la ciudad en un comunicado citado por CNN.
Reacción de la familia
Por otro lado, el abogado de la familia del fallecido, Shaka Johnson, declaró que los videos muestran a Wallace sufriendo una "obvia crisis de salud mental".
"Parece ser una persona en una especie de 'nube' o estupor o simplemente no comprendiendo la gravedad de ese momento en particular, lo que se alinearía perfectamente con lo que la familia estaba gritando: 'está loco, está loco'", dijo.
También subrayó que la familia no pidió que los oficiales fueran acusados de asesinato. En cambio, criticó a la ciudad por no proporcionarles armas menos letales. "Fueron entrenados incorrectamente y no tenían el equipamiento adecuado para realizar su trabajo", concluyó.