En las últimas horas, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, anunció no competirá por la reelección contra Donald Trump. Ante esa situación, se abrió un proceso de sustitución de candidato dentro del partido demócrata.

Este domingo, Biden informó que, a sus 81 años, abandona su candidatura para una posible reelección en noviembre. “Creo que lo mejor para mi partido y el país es que me retire y me concentre únicamente en cumplir con mis deberes como presidente durante el resto de mi mandato”, dijo el presidente en un comunicado.

Y agregó: ""Ha sido el mayor honor de mi vida servir como su Presidente. Y aunque ha sido mi intención buscar la reelección, creo que es en el mejor interés de mi partido y del país que me retire y me concentre únicamente en cumplir con mis deberes como Presidente durante el resto de mi mandato".

Ahora, con Biden afuera de la carrera a la Casa Blanca, comienza una nuevo escenario, donde los demócratas deberán seleccionar al candidato para medirse contra los republicanos. En ese sentido, el presidente estadounidense otorgó su apoyo a la vicepresidenta Kamala Harris, que podría inclinar la balanza para que finalmente sea la elegida.  

En tanto, es la primera vez que un mandatario se retira de la reelección tan tarde en el proceso electoral. Es por eso que el partido Demócrata tiene previsto celebrar una reunión de su convención en el mes de agosto y en ese marco de definirá al elegido.

Si Biden hubiera continuado más allá de esa convención, el proceso sería más engorroso, pero al haber tomado esa decisión antes, alcanza para que su sucesor sea escogido el mes próximo.

Po último, en el comité que realizará en pocas semanas, el actual presidente norteamericano controla 3.908 de los 3.939 delegados, es po eso que Harris es la principal candidata de ese espacio. No obstante, el actual mandatario también podría darles libertad de acción.