Por Crónica

Gobiernos y líderes políticos de Latinoamérica, Estados Unidos, Europa y organismos como la ONU y la OEA repudiaron hoy el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse, cometido esta madrugada en su casa por un comando de personas aún no identificadas.

"Acompañamos al pueblo haitiano y llamamos a la unidad para restablecer el Estado de derecho y la democracia ante este crimen atroz", escribió via Twitter el presidente Alberto Fernández, en medio de una lluvia de mensajes de solidaridad similares de la región.


"Lamentamos profundamente el asesinato del Presidente de la hermana República de Haití, Jovenel Moïse. Condenamos estos hechos de violencia que deben esclarecerse",  posteó en la misma red social el presidente de Bolivia, Luis Arce.


Un similar mensaje tuiteó el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, sobre el octavo presidente latinoamericano asesinado en sus funciones desde la Segunda Guerra Mundial. "Lamentamos profundamente el fallecimiento del Moïse. Condenamos enérgicamente el hecho violento que causó su muerte", aseguró.


Durante una conferencia de prensa, el presidente mexicano Andrés López Obrador lamentó el asesinato de Moïse y agregó: "Estábamos por enviar 150 mil dosis de vacunas a Haití, que es un pueblo pobre muy necesitado de la ayuda internacional”, según informó la agencia de noticias ANSA.

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En el mismo sentido se manifestaron los organismos de relaciones exteriores de varios países de la región.
"Rechazamos el asesinato del Presidente de Haití. Toda nuestra solidaridad con el pueblo haitiano en este difícil momento. ¡Justicia contra los responsables!", anunció en un tuit la Cancillería de Colombia.


Chile también se expresó a través de su canciller Andrés Allamand, quien vía Twitter condenó "firmemente el asesinato del presidente de Haití, Moïse" y pidió urgente "buscar una salida pacífica a la crisis que vive el país con unidad, respeto por la democracia y el Estado de Derecho".


Por su parte, la Cancillería de Uruguay emitió un comunicado en su web en el que expresó su "más enérgico repudio y condena al atentado en el que fue asesinado el Presidente de la República de Haití en su residencia esta madrugada".

También el Gobierno de Venezuela se manifestó a través de un tuit de Jorge Arreaza, su canciller: "Condenamos con firmeza el terrible asesinato del Presidente de Haití”-, mientras que el presidente saliente de Perú, Francisco Sagasti, destacó que "estos hechos que enlutan a nuestra región no deben quedar impunes".


Por su parte, la Casa Blanca calificó de "horrible" el crimen y dijo a través de la secretaria de prensa, Jen Psaki, que Estados Unidos está dispuesto a ayudar en la investigación.

"Ayudaremos de cualquier manera al pueblo de Haití, al Gobierno de Haití, si hay una investigación", dijo y añadió que la Casa Blanca estaba "todavía reuniendo información" y que el presidente Joe Biden sería informado sobre el ataque en breve.

El primer ministro británico, Boris Johnson, por su parte, dijo vía Twitter estar "consternado y entristecido" y calificó el hecho como un "acto odioso", al igual que el presidente español Pedro Sánchez, quien pidió "un llamamiento a la unidad de las fuerzas políticas para encontrar una salida a la grave crisis que vive el país".


También Francia condenó el "cobarde asesinato" a través de un tuit de su ministro de Relaciones Exteriores, Jean-Yves Le Driand, y pidió "esclarecer las circunstancias de este crimen que se produce en un clima político y de seguridad muy deteriorado".

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La ONU y la OEA se sumaron al rechazo


"Los miembros del consejo están profundamente consternados por el asesinato del presidente Moïse y preocupados por el destino de la primera dama, Martine Moise, que también fue baleada y herida en el atentado", expresó el presidente del Consejo de Seguridad de la ONU, Nicolas de Rivière, según informó la agencia de noticias AFP.

La OEA también condenó el asesinato y agregó que "los desacuerdos y los disensos forman parte de un sistema de Gobierno vigoroso y sólido. Los asesinatos políticos no tienen lugar en una democracia", enfatizó el organismo a través de un comunicado en su web.

"Llamamos a poner fin a una política irresponsable que amenaza con hacer fracasar los avances democráticos y el futuro del país", concluyó la OEA.

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