Una maestra de Lacerdópolis, una localidad de  Brasil, fue detenida y acusada de matar a su marido y esconder el cuerpo en un freezer durante una semana. La mujer afirmó que fue víctima de violencia de género y que experimentó una “sensación de libertad” después del crimen.

El cadáver congelado de su esposo, Valdemir Hoeckler, de 52 años, fue hallado el sábado pasado por la noche en la casa donde vivía la pareja. El hombre era buscado desde el 15 de noviembre pasado, fecha en que la mujer, Claudia Tavares Hoeckler, denunció su desaparición.

De acuerdo a los investigadores, la mujer declaró el viernes y permitió que la Policía ingresara a la vivienda al día siguiente. Hasta ese momento, no se la consideró sospechosa.

Más tarde, los agentes notaron lesiones en su cuerpo, “posiblemente por una lucha física”, explicó el jefe de Policía Gilmar Antônio Bonamigo, responsable de la investigación. Allí comenzaron las sospechas.

El sábado, cuando los agentes le tocaron el timbre, Claudia ya se había dado a la fuga. La mujer se mantuvo escondida hasta este martes, cuando se entregó. Según la Policía Civil, la sospechosa confesó el crimen y afirmó que actuó sola en el homicidio. También dijo que mató a su marido después de darle tres pastillas que lo hicieron dormir.

Según un investigador, la asesina ya había radicado una denuncia contra su marido por violencia en 2019, pero luego “se reconciliaron”. La maestra declaró que Hoeckler la había amenazado de muerte a ella y a su hija. “Dijo que era él o ella y por eso decidió matarlo”, sostuvo.

Un día antes de entregarse, Claudia dio una entrevista por YouTube con el periodista Beto Ribeiro. “Voy a cumplir mi condena ahora, voy a ir a la cárcel, pero nunca me sentí tan libre”, confesó.