Dos hombres y una mujer fueron rescatados de una isla desierta al sur de los Cayos de Florida, Estados Unidos, después de sobrevivir durante más de 30 días en los que solamente pudieron comer ratas, cocos y caracoles. La Guardia Costera yanqui detalló que divisó a las personas que ondeaban banderas improvisadas, mientras realizaban una patrulla aérea de rutina en las aguas alrededor de Anguila Cay, en una cadena de islas perteneciente a Bahamas, entre los Cayos Inferiores y Cuba.

“Fuimos alertados por las banderas que tenían además de una gran cruz que ellos mismos colocaron”, comentó el comandante de la aeronave, Mike Allert. De inmediato, organizaron una misión de rescate y regresaron al lugar para dejarles agua, comida y una radio.

Sin embargo, debido a las malas condiciones meteorológicas, el rescate se retrasó otras 24 horas. Del operativo participó un equipo de helicópteros que los recogió y los llevó a un centro médico para que les realizaran una serie de controles, con los que comprobaron que ninguno presentaba un cuadro de gravedad. Sin embargo, su estado no era el mejor, ya que desde hacía 33 días llevaban una dieta a base de cocos, caracoles y ratas.

Malas condiciones

Allert relató que las tres personas parecían estar deshidratadas, fatigadas y “en una situación desesperada debido a la falta de agua dulce en la isla”. Además, expresó que eran oriundos de Cuba y que contaron que su bote se hundió en aguas turbulentas casi cinco semanas antes, pero pudieron nadar hasta la isla desierta.

“Esta fue una operación muy compleja que involucró activos y tripulaciones de diferentes unidades”, agregó Sean Connett, oficial de la Guardia Costera, quien añadió: “Gracias a la buena comunicación y coordinación entre los centros de comando y los pilotos, pudimos llevar a todos de manera segura a un centro médico antes de que la situación empeorara”. Lo que aún no fue determinado es si el grupo intentaba llegar a Estados Unidos o si se trataba de pescadores que se perdieron en el mar.

Más allá de eso, Brandon Murray, suboficial de la Guardia Costera, reiteró que fue casi un milagro que lograran sobrevivir. “No puedo recordar que salváramos a personas que estuvieron varadas durante más de un mes en una isla. Eso es nuevo para mí”, concluyó.