La novela electoral de Perú llegó a su fin el pasado 20 de julio, cuando la junta electoral declaró como ganador del balotaje a Pedro Castillo, quien finalmente se impuso por aproximadamente 44.00 votos sobre Keiko Fujimori. Menos de 48 horas separan el maestro rural de ser embestido como el nuevo jefe de estado, reemplazando a Francisco Sagasti, quien había asumido por lo que nosotros conocemos como acefalía.

La ceremonia de investidura tendrá lugar el próximo miércoles 28 de julio y contará con la presencia de varios líderes y ex líderes de la región. Para muestra un botón, Evo Morales arribó este lunes a la capital peruana, donde permanecerá hasta el evento. Quien fuera presidente de Bolívia por más de 13 años, comentó que ambos países deberían diseñar una agenda “binacional”, ya que "sería el mejor homenaje a nuestros próceres que intentaron la unidad en la Confederación Peruano Boliviana”.

El presidente electo se llevó la segunda vuelta con el 50,13% de los votos.

A su vez, demostró su cercanía para con el presidente electo. "Estuve en permanente contacto con el hermano Pedro durante la campaña, después de la campaña, es dirigente sindical, tenemos coincidencias políticas y programáticas", declaró Morales.

A su vez, sugirió que tanto Perú, como Bolivia y Argentina, deberían industrializar la producción del litio, materia prima de las baterías. "Si lo hacen, estoy seguro que de aquí a poco tiempo, estos tres países sudamericanos serían una potencia en baterías de litio a nivel mundial; es parte de la agenda, seguramente se va a trabajar con el presidente 'Lucho' Arce", comentó el ex jefe de estado.

"Saludamos y expresamos respeto y admiración a Pedro Castillo de Perú que tiene un programa similar al nuestro", expresó Evo Morales durante el pasado mes de abril.

Ya que el ex presidente lo trajo a colación, vale la pena recordar que el hoy máximo mandatario boliviano ya confirmó su participación en la juramentación de Castillo. "Será grato acompañarle en esta fecha histórica, en la que el pueblo hermano también celebra el Bicentenario de su Independencia", escribió Luis Arce en su cuenta de Twitter.

Otro que ya anticipó su presencia es Alberto Fernández. El presidente argentino viajará a Lima para estrechar “la diestra” con su nuevo homólogo peruano. Recordemos que el día de su asunción, coincide con la celebración de los 195 años de independencia del país latinoamericano.

El mejor amigo de Dylan, ya había saludado a Castillo cuando la junta electoral lo declaró como vencedor oficial del balotaje. “Quiero reiterar mis felicitaciones a Pedro Castillo, quien fue elegido democráticamente y proclamado presidente de nuestros hermanos del Perú. Juntos trabajaremos por una Latinoamérica unida”, redactó en su momento.

Por su parte, Guillermo Lasso, flamante presidente de Ecuador, también dirá presente en el acto, según confirmaron desde su gobierno. Acudirá con una delegación de 7 personas, que será encabezada por el canciller Mauricio Montalvo. El ex empresario fue electo también en este 2021 y asumió en funciones el pasado 24 de mayo.

Tras mas de un mes de incertidumbre, Keiko Fujimori reconoció la derrota. 

La realeza español. tampoco se quiso quedar afuera, por lo que la Casa Real confirmó que el Rey Felipe VI estará viajando a Perú el día martes 27.

Quien brillará por su ausencia será el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou. Según trascendió, el enviado del país charrúa será su canciller, Francisco Bustillo. El funcionario tiene experiencia en suplir a su presidente, ya que participó de las asunciones de Luis Arce en 2020 y de Guillermo Lasso hace pocos meses.

Otro que prefirió esquivar la ceremonia fue Jair Bolsonaro, quien será suplido por el vicepresidente, Hamilton Mourao. Recordemos que el polémico presidente hizo declaraciones no muy amistosas para con Pedro Castillo, previo a felicitarlo cuando fue declarado ganador.

"Ahora perdimos Perú. Faltando el 1 % del escrutinio, solo un milagro puede revertir el resultado. Va a asumir (como presidente) una persona del Foro de Sao Paulo”, manifestó en Twitter horas después de que la tendencia fuera favorable para el maestro rural.