Covid: la curiosa propuesta del presidente de un país europeo para que la gente se vacune
El primer mandatario de Austria, Alexander Van der Bellen, puso a disposición su oficina como centro de inoculación para tratar de subir el bajo porcentaje de inmunizados. Una cadena de supermercados y la Iglesia tomaron la misma medida.
Un peculiar medida fue propuesta por el presidente de Austria, Alexander Van der Bellen, quien invitó a sus compatriotas a inocularse contra el Covid en su oficina del Palacio Imperial de Holfurg, y todo debido a que se busca elevar los índices de población vacunada.
"Si siempre han querido ver el Hofburg y todavía no se han vacunado contra el Covid-19, vengan (...) y después les invito a dar un paseo por la oficina presidencial", dijo en un videomensaje transmitido en sus redes sociales.
Cabe destacar, que el primer mandatario hizo esta propuesta en vísperas del Día Nacional de Austria que se celebra el 26 de octubre. Está previsto que este día en el Palacio Imperial de Hofburg organizarán un punto de vacunación que estará abierto de las 12 a las 18. Los ciudadanos austríacos podrán recibir los fármacos de Pfizer y Johnson & Johnson, informó la agencia Sputnik.
Austria tiene más del 61,7% de su población totalmente vacunada, unos 5,5 millones de personas, según datos oficiales.
Covid: otros sitios para vacunar
En la ciudad de Viena, una cadena de supermercados abrió en varias tiendas puntos de inmunización. La Iglesia se volcó con la campaña y cedió un espacio en la Catedral de San Esteban para vacunarse, y además, un autobús va recorriendo la ciudad para acercar la vacuna a los barrios más periféricos.
Mientras otros países ricos de Europa vuelven a la normalidad, las autoridades austríacas están endureciendo las medidas y el Ayuntamiento de Viena decretó que desde el 1 de octubre solo quién esté vacunado o haya pasado la enfermedad, podrá entrar en locales nocturnos o acudir a actos con más de 500 personas.
Austria: miedo por la llegada del invierno
Por otra parte, algunos expertos estiman que para evitar una nueva oleada de contagios, un millón de austríacos más tendrían que vacunarse. Con un ritmo medio de 13.000 nuevas vacunas diarias la última semana, el país no llegaría a esa marca hasta el 7 de diciembre. Por eso, muchos expertos afirman que es ya demasiado tarde.
Thomas Czypionka, analista de política sanitaria del Instituto de Estudios Avanzados de Viena, afirma que habría que haber empezado a principios del verano a analizar por qué mucha gente no se vacuna.
Culpa, como otros expertos, a los zigzags y los mensajes contradictorios del Partido Popular de Kurz y Los Verdes, que dirigen Sanidad, socios de Gobierno.
Apuntó, en declaraciones recientes a la tele pública ORF, que habría que lanzar campañas en las redes sociales para que los jóvenes, apenas la mitad de quien tiene entre 15 y 24 años se vacunó, entiendan el riesgo que supone el covid-19 para los mayores.