Una tragedia generó un impacto en los últimos días. Un hombre de 59 años murió de infarto mientras estaba celebrando su último día de trabajo junto a todos sus compañeros. El sujeto, que era soltero, sin hijos y vivía con su madre, trabajó más de 30 años en la empresa.

El trágico hecho ocurrió en la localidad de Piazzola sul Brenta, en Italia. Un hombre, llamado Michele Barco, se jubilaba y decidió organizar una fiesta para que su último día en el trabajo pueda celebrarlo junto a sus compañeros.

El hombre había llevado comida y bebida para despedirse de la mejor manera de la empresa de confección Belvest, en la provincia de Padua, en la cual trabajó durante más de 30 años. Sin embargo, en su último día sucedió una tragedia

Un hombre murió mientras celebraba su último día de trabajo junto a sus compañeros.

En medio de los festejos, y cuando todo estaba listo para el brindis, incluso con un licor, el hombre se desvaneció frente a los presentes y murió. Tras lo sucedido, los compañeros llamaron rápidamente a los servicios de emergencia, según informó el diario Il Messaggero.

Al lugar llegaron los paramédicos, pero a pesar de cada uno de los intentos de reanimación no lograron salvarle la vida al hombre, que se desempeñaba como responsable del control de calidad en la empresa textil. Según informaron, el trabajador sufrió un paro cardíaco.

El fatídico acontecimiento conmocionó al personal de la empresa, quienes no comprendían aún lo sucedido en pleno festejo. Incluso desde la gerencia decidieron suspender toda la actividad durante ese día y rendirle un homenaje a su compañero.

Barco no estaba casado ni tenía hijos; vivía con su madre, ya muy anciana, en Piazzola, un pueblo que nunca había querido abandonar. Sus compañeros aseguraron que el hombre era un veterano de la empresa y que les enseño a muchos de ellos su oficio, por eso todos lo querían y respetaban por sus valores dentro y fuera del horario de trabajo.