Este miércoles al mediodía, Joe Biden se convertirá en el nuevo presidente de los Estados Unidos. Será una ceremonia de toma de posesión reducida y con eventos virtuales debido a la pandemia. Dos hechos destacables son que no estará el presidente saliente, Donald Trump, y que Washington DC se ha convertido en una ciudad militarizada y se prepara para posibles disturbios producidos por militantes "trumpistas".

Por lo pronto, ya se ha anunciado que en su primer día como presidente norteamericano, Biden propondrá regularizar a millones de indocumentados. Una clara vuelta de página con la administración saliente. Biden será juramentado por el presidente de la Corte Suprema, John G. Roberts Jr., en el Frente Oeste del Capitolio antes del mediodía.

Se espera que el nuevo presidente dé su discurso inaugural y pase revista a las tropas militares, como es tradición. Pero en lugar del desfile que recorre la avenida Pennsylvania frente a espectadores que vitorean mientras el nuevo presidente, la vicepresidenta y sus familias se dirigen a la Casa Blanca, habrá una escolta oficial con representantes de todas las ramas del ejército a lo largo de una cuadra de la ciudad.

Para los espectadores remotos, el comité inaugural ha planeado lo que llama un desfile virtual por todo el país con música, poetas y bailarines. También habrá un evento televisivo en horario de máxima audiencia el 20 de enero con la participación de celebridades como Tom Hanks, Justin Timberlake y Jon Bon Jovi.

Durante semanas, Washington se ha preparado para la posibilidad de que haya incidentes. El operativo de seguridad dispuesto será el más importante desplegado en Washington para una ceremonia de investidura presidencial, con unos 25.000 miembros de la Guardia Nacional presentes en la capital, dos de los cuales fueron removidos ayer por vínculos con grupos extremistas.

En cuanto a las primeras medidas a tomar, Biden planea presentar este miércoles mismo un proyecto de ley para regularizar a 11 millones de indocumentados que viven en el país en el término de ocho años. La legislación, que ya fue redactada y se espera tenga cientos de páginas, incluye un camino inmediato a la ciudadanía para los llamados "dreamers", los jóvenes que llegaron ilegalmente a Estados Unidos de pequeños, y ayuda a países de Centroamérica de donde provienen miles de inmigrantes ilegales.

Con este proyecto, Biden buscará cumplir una importante promesa de campaña para los votantes latinos y otras comunidades de inmigrantes. Asimismo, el demócrata firmará decenas de órdenes ejecutivas, según un memorando del jefe de gabinete entrante, Ron Klain, que incluye la rescisión de la prohibición de arribos desde países predominantemente musulmanes.