La erupción submarina del volcán Hunga Tonga-Hunga Ha’apai, sucedida el pasado sábado, tuvo consecuencias en países a más de 100 mil kilómetros de distancia, provocando lluvias de cenizas, destrozos y oleajes suficientemente fuertes como para arrastrar camionetas. Lógicamente, el mundo acudió a las redes sociales para registrarlo.

Desde la popularización de redes sociales como Twitter, Instagram y más recientemente TikTok, son pocos los sucesos de importancia global que no quedan registrados desde múltiples ángulos y en variantes niveles de definición por cualquier transeúnte con un teléfono celular. La erupción en las aguas de Oceanía no fue excepción de esta regla, y dejó más de un impactante video viral en las redes sociales.

Las islas de Tonga fueron las primeras comunidades afectadas por las violentas olas que se desprendieron de la erupción, es por eso que las primeras imágenes virales llegaron desde este pequeño reino. A pocas horas de que el tsunami golpeara las costas de Tonga, Twitter estaba repleto de fotos y videos bajo el hashtag #TongaTsunami. Uno de los videos más populares registró la llegada del agua a Nuku’alofa, la capital de Tonga:

Las olas no fueron la única consecuencia que dejó el volcán. El sonido de su erupción también se expandió estrepitosamente, llegando a escucharse en Alaska, Fiyi y el Reino Unido. En típica tradición digital, un video que logró capturar el momento del boom sónico fue publicado en YouTube para después aparecer en Facebook, donde un usuario de Twitter lo grabó y publicó en un posteo viral:

Pero los efectos del volcán no se detuvieron en las islas oceánicas. Pronto, países alrededor del mundo emitieron alertas de oleajes violentos en sus costas más vulnerables. Otro increíble video viral fue capturado cerca de Ecuador, cuando un grupo de pesqueros avistaron las grandes olas llegadas de Tonga y detuvieron sus actividades para capturar el fenómeno y subirlo a Internet:

Mientras las redes sociales sirvieron durante la catástrofe natural para ilustrar las consecuencias dejó la erupción en Tonga, no conviene creer todo lo que vemos en Internet. Pocas horas después de que el tsunami golpeara las islas de Tonga, un grupo de videos se viralizaron alrededor del mundo, supuestamente mostrando a tres irresponsables habitantes de las islas grabándose con palos de selfie mientras el violento oleaje los arrastraba:

Las imágenes, que primero aparecieron en Twitter, llegaron a noticieros y diarios de todo el mundo como un ejemplo de los riesgos que las personas correrían por 15 minutos de fama en la Internet. Sin embargo, los videos no tienen relación alguna con el tsunami en Tonga: en realidad, fueron grabados hace un mes en Indonesia, y las olas que arrastran a los protagonistas no son las de un tsunami, sino parte de un fenómeno llamado olas "Bono", un suceso anual que produce olas altas e ideales para surfear