Les ofrecía trabajo, las citaba en su "oficina" y en la entrevista las acosaba sexualmente
EXCLUSIVO de cronica.com.ar. La hermana de una de las víctimas hizo público el caso en las redes sociales, se hizo viral y otras 7 chicas se organizaron para llevar el caso a la justicia.
Un grupo de chicas denunció el acoso sistemático, en una entrevista laboral, de un sujeto que les ofrecía un trabajo en el ámbito del turismo, en el partido bonaerense de Quilmes.
La publicación de una de ellas se viralizó en las redes sociales, e inmediatamente otras víctimas se contactaron y crearon un grupo para movilizarse y llevar a la justicia el caso. Ahora, piden que el episodio se difunda para que ninguna otra piba pase por lo mismo.
Las demandas fueron radicadas por tres jóvenes en los tribunales de Quilmes y los testimonios coinciden con el modus operandi de Jorge Orlando Cavaliere, titular de una agencia de turismo de la mencionada localidad:
¿Cómo las captaba este pervertido?
El sátiro las citaba para una entrevista, las llevaba a un cuarto chico dentro del negocio y les hacía preguntas incómodas, además de ofrecerles "más dinero" si lo acompañaban "en la intimidad".
Cronica.com.ar recolectó testimonios de víctimas que se animaron a hacer público lo que vivieron en ese cuarto. Las pibas se presentaron con la esperanza de conseguir una oportunidad laboral y se fueron con miedo de contar lo que les había sucedido.
Tener pareja "era un problema".
"Un familiar me pasó la foto de la búsqueda y acerqué mi currículum: a los días me llamo este señor y como vivía cerca fui rápidamente", recordó una de ellas a este medio. "Me hizo pasar a un cuarto chiquito. Primero me habló de una empresa de micros de larga distancia que tiene y supuestamente no estaba habilitada por el tema de la pandemia", añadió.
No pasó mucho tiempo hasta que comenzaron los cuestionamientos y comentarios incómodos: "Me preguntó si estaba de novia, casada, si tenía pareja e hijos. Que el único problema que tenía era si estaba de novia ya que 'cómo iba a reaccionar si algún compañero me tocaba el culo, me apoyaba o me quería robar un beso'".
"Estaba anonadada y no sabía qué decirle", insistió quien inmediatamente le respondió que "les diría que no y que pondría un límite o no les hablaría más".
La situación se iba agravando a medida que pasaban los minutos de la "entrevista" laboral: "Me pidió que me bajara el barbijo para verme la cara y comentó que era 'raro' que con 'la cara que tenía' nunca había sufrido acoso en ningún trabajo". Luego la propuesta se tornó aún más desagradable: "Me preguntó cuánto quería ganar, que me podía dar 25 mil si salía con él". La joven "no tenía palabras" y hasta tenía miedo de escapar porque antes de la puerta de salida había otra reja donde había otro chico.
Necesitaba una secretaría "que fuera un camión".
Otra de las víctimas, también fue consultada por su estado civil: al responder que no tenía novio, "anotó 'soltera' en mi curriculum y lo subrayó'", recordó.
A ella le explicó que se iba a poner una terminal de micros en Quilmes, "que iba a tener muchas empleadas, negocios y una oficina, dando a entender que iba a ser algo grande", indicó. Pero que el sueldo que podía ofrecerle "era bajo" a menos que "estuviera con él pero debía ser en secreto". Le explicó que "tenía que salir del trabajo, ir hasta una esquina y me esperaba en su auto donde me pagaba el dinero extra".
No solo era una "propuesta" para ella, sino que también le consultó si "tenía amigas que estuvieran interesadas de estar con él en la intimidad y que le enviara sus fotos". Además, le dijo que podía "ascenderla" ya que iba a necesitar "una secretaria pero que iba a tener que estar únicamente con él". Textualmente le indicó: "Necesito una secretaria que sea un camión, cosa que cuando ella llegue a una reunión con otros hombres, a ellos se les caiga los pantalones".
"Dijo muchas cosas siempre dando a entender que quería que las empleadas se acuesten con el y hablaba de la presentación, sobre cómo tenían que estar vestidas. Me miro el cuerpo, me dijo que estaba bastante presentable y que después me quería decir más cosas pero que no se podía en la agencia porque lo iban a escuchar", aseguró. Y añadió: "Que me iba a llamar para tomar un café solos".
Ante sus palabras, la joven se quedó "helada" y solo pudo decirle: "Sin ofender, pero yo solo quiero trabajar y todo lo que me comentó no me interesa". Al intentar salir, él la seguía reteniendo "con más comentarios" hasta que finalmente pudo irse y "su mujer que estaba en la puerta me saludó".
Ahora las jóvenes se organizaron y fortalecieron para denunciarlo. Además, "tenemos mucha gente que nos informa, que lo conoce, diciéndonos que él hace esto hace muchos años. también comentan que manosea a sus empleadas y las acosa constantemente".
"Ahora se escondió en una quinta. Somos chicas que estudiamos, que queremos trabajar, no queremos ir a una entrevista entusiasmadas y que nos acosen. No queremos que le pase a ninguna otra chica", concluyó.
Quería "fotos provocativas y con poca ropa".
"Fui porque realmente necesitaba el trabajo", relató la tercera víctima. "Me pidió que me sacara el barbijo y una campera grande a lo que me negué", recordó. Inmediatamente, el sujeto "empezó a levantar el tono de voz diciéndome que entonces le mandara fotos semidesnuda para verme".
Quería imágenes de ella "con poca ropa y provocativas, además de pintada", ya que a los clientes hombres "le llamaba la atención eso de las chicas". También insistió con que "no quería señoras grandes porque no tendría la misma suerte que conmigo".