Una tragedia se desató anoche en Paraguay cuando se produjo un tiroteo en el multitudinario festival de música Ja'umina que se desarrollaba en el Anfiteatro José Asunción Flores de San Bernardino, localidad ubicada a 50 kilómetros de Asunción. El saldo: dos personas resultaron muertas, entre ellas la esposa del futbolista Iván Torres, Vita Aranda, además de registrarse varios heridos.

Las primeras informaciones dan cuenta de la presencia de un sicario en el lugar por un ajuste de cuentas narco. La otra víctima fatal fue un supuesto traficante, Ederson Salinas Benítez, el principal objetivo del asesino. Los demás heridos fueron casuales, por encontrarse, por infortunio, cercanos al ataque.

Según informó el diario local La Nación, la directora del Hospital Nacional de Itauguá, Yolanda González, confirmó a medios de comunicación que Aranda llegó intubada, se le practicó reanimación durante 25 minutos y finalmente se confirmó su deceso.

La mujer llegó al hospital en estado gravísimo, con herida con arma de fuego en la cabeza, con pérdida de masa encefálica. Estaba con pronóstico reservado, pero finalmente falleció, según informó la profesional.

La joven llegó muy graves al hospital y falleció a los pocos minutos.

Torres es recordado en nuestro país por su paso por Colón entre 2016 y 2017, adonde fue cedido a préstamo desde Olimpia, el club en el que se mantenía hasta ahora.

Su mujer, la personal trainer e influencer, de 29 años, había anunciado su divorcio pero últimamente se los veía juntos intentando un proceso de reconciliación. Compartían tres hijos, y fueron noticia el año pasado por perder un embarazo de su cuarto bebé juntos.