La semana pasada, Esteban Rolón había decidido tomar el toro por las astas y no se presentó a entrenar con sus compañeros de Huracán el viernes y el sábado como una forma de presionar para que se cierre su transferencia a Boca. Pero, este lunes, el mediocampista volvió a pegar un volantazo en su estrategia. 

Es que, para sorpresa de todos, el blondo jugador se presentó al entrenamiento del Globo y trabajó a la par del resto del plantel, lo que lleva a pensar en dos escenarios distintos pero que derivan en el mismo objetivo: jugar en el Xeneize. 

Uno es que Rolón haya reflexionado o haya recibido el consejo de presentarse nuevamente a trabajar para evitar que la situación se ponga más tensa y que esto termine empantanando la negociación entre los clubes. 

La otra es que el jugador haya recibido la certeza de que el pase ya está encaminado y que en breve vestirá la camiseta de Boca, por lo que haya decidio presentarse a las prácicas como una manera de calmar las aguas. 

Lo cierto es que el futbolista tiene el pase en su poder y firmó un contrato con Huracán hasta el 31 diciembre, con una opción de compra de 3.000.000 de dólares y una cláusula de salida en junio por 500.000 dólares.

En las primeras conversaciones entre las partes, Alejandro Nadur indicó que no tendría problemas en dejar ir a Rolón por el mismo dinero que Boca debería pagar dentro de cuatro meses. Sin embargo, el presidente de Huracán quiere esa cifra de manera íntegra y la parte impositiva puede ser una traba.