El cuerpo sin vida de una adolescente fue hallado por un grupo de vecinos a orillas de un arroyo y los sospechosos del brutal asesinato son tres hermanos de 30, 27 y 17 años quienes ahora se encuentran detenidos y a disposición de la justicia.

El hecho ocurrió en la localidad de Monte Caseros, en la provincia de Corrientes. Según los datos preliminares de la autopsia, la víctima fue abusada sexualmente y asesinada con una puñalada.

La víctima fue identificada como Milagros Espinoza, de 14 años, quien había sido reportada como desaparecida desde la noche del martes. El barrio Florida quedó conmocionado tras el macabro hallazgo. La madre de la adolescente, una de las primeras en llegar a la escena, sufrió una crisis de nervios y tuvo que ser trasladada al hospital.

Para conocer los detalles convocamos a la palabra del periodista Alejandro Ledezma.

“Los principales sospechosos y posibles autores están detenidos, queremos llevar esa tranquilidad. Se están recabando las evidencias suficientes para llegar a la solución del caso. No puedo dar muchos datos debido a que es muy reciente”, informó la fiscal a cargo de la investigación, Clara Belén Arrúa, a los medios locales.

Y agregó: “El cuerpo de la menor será trasladado a Paso de los Libres. Se están haciendo todos los peritajes. Ahora vamos a entrevistar a los testigos y queremos hacerlo lo más rápido posible para tener fresca la memoria de los mismo y que sus testimonios sean realmente importantes y relevantes”.

También se ordenó un examen toxicológico porque no se descarta que la adolescente haya sido drogada antes del ataque sexual.

Según se pudo conocer, los tres hermanos acusados de cometer el crimen habían llegado a la provincia litoraleña a principios de este año, desde La Matanza. Se los conocía como "Los porteños", y afirmaron que “tenían hábitos nocturnos", ya que "todas las noches solían escuchar música con el volumen muy alto y no trabajaban".

La Policía no pudo evitar que los vecinos quemaran la casilla en la que vivían los sospechosos. Se trata de una precaria construcción donde se presume ocurrió el ataque sexual y el posterior asesinato. 

Los vecinos rodearon la instalación e intentaron linchar a los hermanos sospechosos, pero la Policía intervino rápidamente y los sacó del lugar. Pocos minutos después, la vivienda fue incendiada, perdiéndose evidencias que podrían ser clave para la investigación judicial.

En diálogo con Crónica, el periodista Alejandro Ledezma, quien se encuentra en el lugar de los hechos, explicó que la víctima cursaba primer año de la escuela secundaria y que en ese ámbito fue donde "entrelazó una amistad" con uno de los sospechosos que "no era bien visto" por el resto de la comunidad.