El abogado Fernando Burlando, que representa a la familia de Fernando Báez Sosa, habló esta jornada tras una nueva audiencia en el Tribunal de Dolores y expresó que fue una "matanza planeada". Tras escuchar los testimonios de los forenses y los médicos, remarcó que el joven de 18 años fue "asesinado en el lugar" y apuntó que los rugbiers "no le dieron ninguna oportunidad de vivir".

"La matanza fue en el mismo lugar", apuntó el letrado ante los medios presentes en Dolores y describió sobre el ataque contra Fernando Báez Sosa: "Cada golpe era como un tiro". Luego señaló: "Estaba en el piso y la resistencia la provocan solo el tamaño de su cuerpo y el piso. Jamás reaccionó. Fue asesinado en el lugar y no le dieron oportunidad a nada".

En un balance de la sexta jornada del juicio, Fernando Burlando señaló: "Ha sido una jornada concreta en cuanto a las lesiones. Es para descartar todo tipo de fantasmas. El deceso se produjo después de la golpiza".

"Se está hablando de que hubo tardanza de los servicios de emergencia y de la reanimación: no hay forma, todo hubiese sido igual. Fernando ya estaba muerto cuando intentaban reanimarlo", resaltó el abogado ante los periodistas.

Además, el abogado querellante reiteró que las agresiones que Báez Sosa recibió "fueron en lugares vitales". "No fue un solo golpe o un solo puntinazo. Fue un cúmulo de golpes que provocaron la muerte en ese momento", completó Burlando.

Por otra parte, el letrado apuntó contra los agresores y describió que "estaban totalmente excitados y fuera de sí", al tiempo que remarcó que las evidencias muestran que tienen "desprecio por la vida".

"Si vos no planeas, ¿Podés abordar a una persona de una manera como la que abordaron a Fernando?", planteó Burlando ante los medios y recordó: "Le pegaron dos personas a la vez por la espalda".

"No había forma de que no termine inconsciente", insistió respecto a la golpiza, a la que definió como una "matanza brutal". En esa línea, completó: "Estoy convencido de que le pegaron a Fernando cuando estaba muerto".

"Cuando tenés una persona que en vez de pedir auxilio vuelve a su casa, se cambia la ropa para camuflarse, va a comer comida rápida y hace chistes... es que hay conciencia y es que no quedan dudas: acá no hay duda, hubo intención de matar. La matanza fue planeada", analizó el abogado de la familia de Fernando Báez Sosa a la salida del tribunal.