Una pareja decidió tener una cita en un lujoso restaurante por San Valentín y no se privaron de nada. Pero para sorpresa de los encargados del establecimiento, huyeron sin pagar el ticket. Sin embargo, el dueño no se dio por vencido y llevó a cabo un original plan para cobrar su dinero.

El episodio, que se volvió viral, ocurrió el pasado 14 de febrero en Stokesley, Inglaterra. Según se desprende del detalle de la cuenta, los enamorados consumieron cuatro botellas de vino, un bife, langosta, papas fritas, mejillones y curry. La suma total a abonar era de 179 libras (unos $25.474), pero la pareja escapar sin dejar un centavo.

Fue entonces que el dueño de The Mill recurrió a Facebook y con un intimidante mensaje se encargó de compartir lo sucedido para intentar cobrar.

El posteo del dueño del restaurante se volvió viral

“A la encantadora pareja que acumuló una fuerte cuenta que consistía en bife, langosta y numerosas botellas de vino: estamos seguros de que fue un error honesto de su parte que se fueran sin pagar, paguen hoy (martes 15 de febrero) su factura a las 4 en punto”, escribió el administrado desde la cuenta de Facebook del establecimiento.

Además, agregó que la pareja había sido grabada: “Estaban sentados frente a una cámara y el circuito cerrado de televisión no puede ser más claro”. Por lo que si no cancelaban la deuda, irían a la policía con el video.

La publicación rápidamente generó revuelo y muchos de los usuarios pidieron que se difundieran las imágenes de las cámaras  de seguridad para conocer la identidad de los involucrados. Sin embargo, antes de que esto sucediera, la deuda fue saldada de forma inesperada, según consignaron en Teesside Live.

“¡La factura fue pagada por una mujer ‘anónima’, que sería la novia involucrada! Que Dios los bendiga. ¿Quién dijo que el romance está muerto?”, bromearon los dueños.

Finalmente, publicaron el ticket que muestra que, efectivamente, la deuda había sido cancelada.

El singular episodio desató diversas reacciones entre los usuarios. Algunos felicitaron a los dueños del local por su ingenio, otros advirtieron que las imágenes de los supuestos malos clientes no deberían ser borradas aún, pues el pago podría haberse hecho con una tarjeta robada.