Una joven de 22 años de Houston, Estados Unidos, se convirtió en tendencia en las redes sociales por la impactante transformación que tuvo en su rostro a partir de una serie de cirugías estéticas a las que se sometió con el objetivo de parecer lo más posible a un demonio.

Kierstyn Milligan había cobrado fama por el contenido que ofrece en el sitio OnlyFans, donde pidió dinero en esta plataforma para gastarlo con este inédito objetivo: lograr "la apariencia demoníaca perfecta".

Con la ida entre ceja y ceja, avanzó y se realizó decenas de tatuajes, entre los que destacan sus globos oculares, implantaciones dentales, perforaciones en nariz, lengua y pezones, según precisaron algunos de los medios locales.

"Algunas personas asumen que soy malvada o demoníaca debido a las modificaciones que hice, pero no es cierto en absoluto", reveló la excéntrica modelo, quien ya lleva gastados al menos 47 mil dólares en operaciones.

Y agregó, en diálogo con la prensa: “Siempre supe que quería lucir así, tuve esta visión en mi cabeza desde que era joven y finalmente la cumplí. Antes no tenía amor propio o incluso no entendía quién era, ahora siento que me entiendo más a mí misma y tengo más amor y confianza”. 

La joven fue diagnosticada con dismorfia corporal

Milligan, de 22 años, sufre de un trastorno de salud mental denominado “dismorfia corporal”, a través del cual ella no puede dejar de pensar en los defectos que siente tener. Solo quien la padece puede notarlos, ya que las imperfecciones solo están en la cabeza del paciente.

Kierstyn Milligan siente que sus tatuajes y sus cirugías la hacen sentir más “confiada” en quién es y también con su cuerpo. A partir de esta situación, comenzó con la extraña idea de modificar su cuerpo para parecerse al diablo.

Su particular historia se volvió viral en TikTok. Desde la red socia de origen chino, donde tiene más de 700 mil seguidores, va mostrando los detalles de cada intervención que se realiza y los videos explotan de visitas y comentarios.

“Cuando algunas personas ven mis ojos, miran fijamente y señalan sin decir nada, otras me miran mal, y algunas se me acercan directamente a la cara y dicen que lo odian”, explicó la joven sobre lo que nota cuando la gente la mira. Sin embargo, ha dejado en claro que continuará con su “transformación”. Kierstyn Milligan ya planea tatuarse la otra mitad del rostro, además quiere más cirugías “mórficas”.