Los errores al pedir comida por delivery son muy comunes: algo que faltó, no siguieron las instrucciones, demoras en la entrega, entre otros motivos, pueden generarte dolores de cabeza. Sin embargo, los restaurantes también cometen horrores que pueden provocar vómitos a los clientes.

Eso le ocurrió el pasado fin de semana a un matrimonio filipino que vive en Estados Unidos. La pareja reside en Nueva York y habían planeado disfrutar en la comodidad de su hogar una deliciosa comida coreana. 

Sin embargo, sus planes quedaron frustrados al descubrir que había una rata muerta en la sopa que habían pedido.  Además de ser “asqueroso”, como lo describieron, los afectados consideraron de inmediato que la situación ponía en riesgo la salud y tomaron acciones legales contra el local.

Y si bien los neoyorkinos se enfrentan a un severo problema con las ratas desde hace tiempo, parece haber recrudecido durante los últimos meses. Tanto es así que la administración actual incluso declaró una “guerra” contra ellas. Aunque esta historia parece indicar que la están perdiendo.

Eunice Lee compartió la desagradable experiencia a través de su cuenta de Instagram. Según explicó, antes de hacer la publicación tanto ella como su marido buscaron asesoramiento legal. “Ahora nos sentimos libres de compartir algo que nos pasó el fin de semana”, escribió.

La mujer detalló que habían pedido comida de un restaurante llamado Gammeeok y que se encontraron con la “cosa más repugnante” al recibir su orden de gukbap, un plato tradicional coreano. Asimismo, aseguró que con su posteo buscaba que otros lo supieran. “He informado al Departamento de Salud de Nueva York. Gracias a todos por su apoyo. Cuídense”, escribió.

La publicación estaba acompañada de varias fotos y un video donde se puede ver al roedor al fondo de un plato de sopa. El animal se encontraba entre el arroz, los trozos de carne y demás ingredientes. “Esto es tan repugnante; hay una rata muerta en nuestra sopa”, se lo escucha decir el esposo de Eunice en la grabación.

Mi esposo empujó la mesa hacia atrás y fue a vomitar porque acababa de encontrar una rata en nuestra comida. Fue horrible”, dijo al ser entrevistada por varios medios locales.

“La peor parte es que yo ya estaba a la mitad del mío y él había tomado dos tercios del suyo cuando dijo: ¿Qué es este bulto? Lo que inicialmente pensó que era un vegetal, aparentemente era la cola”, recordó.

Los dos terminaron vomitando tras el descubrimiento, y fueron a un centro de urgencias donde les prescribieron antibióticos.

La pareja enfatizó que eran clientes de este restaurante hace una década y se declararon “orgullosos partidarios de la cocina y cultura asiática”. Por eso, enfatizaron que no pretendían usar este incidente para fomentar “el odio o los prejuicios raciales”.

Una publicación compartida por Eunice L Lee (@eunichiban)

El posteo se volvió viral y el restaurante fue clausurado

Luego de que el matrimonio presentó una demanda, el Departamento de Salud e Higiene Mental (DOHMH por sus siglas en inglés) informó que agentes realizaron una inspección en las instalaciones de Gammeeok y encontraron varias violaciones sanitarias:

  • Alimentos prohibidos de fuente no aprobada o desconocida, enlatados o preparados en casa. Animales sacrificados, descuartizados en establecimiento. Pescado envasado con oxígeno reducido y no congelado antes del procesamiento.
  • Evidencia de ratas o ratas vivas en las áreas de alimentos o no alimentos del establecimiento.
  • Alimentos, suministros o equipos no protegidos de una posible fuente de contaminación durante el almacenamiento, preparación, transporte, exhibición o servicio. Condimentos que no están en envases de un solo servicio o dispensados directamente por el vendedor.
  • El establecimiento no está libre de refugio o condiciones propicias para roedores, insectos u otras plagas.

Por lo anterior, las autoridades sanitarias cerraron el establecimiento, según se informa en su sitio web. Al conocerse la medida, Eunice volvió a usar sus redes sociales para informar la clausura del establecimiento.

Las autoridades de Nueva York clausuraron el restaurante.