Los pedidos a los restaurantes ya casi no se realizan con llamadas y la mayoría de los comensales piden sus platos favoritos mediante las aplicaciones, o directamente por WhatsApp y algunos con mensajes privados de Instagram. Esto suele generar momentos inesperados que se vuelven virales en las redes sociales.

Este fue el caso de una usuaria de Twitter que reveló la insólita conversación que mantuvo su papá con un local gastronómico al que le hacía un pedido. Según describe la joven @paulivita, se trata del “mejor minuto con treinta” que se puede ver en la red social del pajarito.

El chat insólito que se hizo viral en Twitter.
El chat insólito que se hizo viral en Twitter.

El inesperado chat comenzó con el padre que hacía un pedido de comida por WhatsApp. Tras enumerar lo que quería cenar, el hombre consultó si podía retirarlo él mismo por el local. Mientras que desde el comercio respondieron: “Sí, claro”.

Luego de que confirmaron la compra, el pago y la entrega, el cliente solo necesitaba saber en cuánto tiempo iba a estar listo el platillo, porque ya se encontraba por la zona del restaurante llamado “Selvatica”.

La empleada del local le contestó que iba a demorar solo 10 minutos, pero el cliente no registró el mensaje y se guardó el celular sin desbloquearlo en el bolsillo. De manera involuntaria sucedió el desopilante imprevisto: le mandó envió un sticker de Soledad Solari.

Además, no fue la única reacción que le contestó sin querer. “Se me disparan dos más, otros dos, y otros dos....”, relató casi llorando de risa el padre de la joven que compartió el video en Twitter.

Luego de la lluvia de memes en forma de stickers, el negocio le contestó “mucho?”, porque habían pensado que el cliente se quejaba por la demora del pedido.

Las mejores reacciones en Twitter y la testigo del chat

Si bien todo sucedió hace un año, la hija del cliente lo subió a Twitter esta semana. La sorpresa es que apareció la trabajadora que recibió la respuesta insólita.

Era yo del otro lado. Se dio cuenta en algún momento claramente, pero me explicó que fue sin querer cuando llegó a retirar el pedido”, explicó una joven a la tuitera que volvió el desopilante momento. 

Me reí sutilmente delante de él, pero me moría de risa cuando iban llegando. Más aún cuando le pregunté si le parecía mucho 10 minutos”, completó @danielaagustinav, que fue la otra protagonista del momento.