Las reseñas son un mundo aparte en todas las redes sociales. Los usuarios que dejan su experiencia de los diferentes lugares suelen tener varios comentarios y reacciones, ya que el resto de los internautas valoran los detalles sobre locales a los que van a visitar. 

Positivas o negativas, muchas reseñas también se adentran en la viralidad y alcanzan una repercusión notable porque muchos usuarios las comparten y hacen memes o análisis al respecto. 

Así suele ocurrir con una cuenta muy activa en Twitter, la cual corresponde a una conocida churrería, la cual no solo se ríen de ellos muchas veces, sino que también exponen a algunos clientes con comentarios desubicados. 

En esta oportunidad, la cuenta dejó en evidencia -sin dar el nombre- a un usuario que dejó un comentario en las reseñas de Google, donde se quejó de los “churreros” que pasan por la playa en la Costa Atlántica, cumpliendo con su trabajo.

“Insoportables”, en mayúscula, fue como comenzó este usuario a quejarse de estos trabajadores, lo cual generó repudio en los usuarios. Sin embargo, la reseña no se quedó solo en eso. 

“No se puede descansar. Mandan a sus vendedores a molestar a la playa ofreciendo churros a los gritos todo el santo día. No pasa un segundo sin que pase un vendedor molestando. No puede ser legal esta práctica. No les compro nunca más. Espero que los multen”, fue la contundente explicación que dio el usuario. 

La reseña que se volvió viral.

La churrería, lejos de quejarse, los expuso con un poco de humor, ya que subió una imagen de la comediante Fernanda Metilli, en el cual hace una clásica broma imitando a los churreros. “Hay churros, bolita. Hay churros”, agregó. 

El tuit se volvió viral en cuestión de horas. Actualmente, ya logró alcanzar los 124 retuits, los 22 citados y superó los 4.800 ‘likes’. 

Los comentarios de los usuarios ante el tuit viral de la reseña

Los usuarios no solo se rieron de la broma de esta cuenta, sino que salieron a respaldarla liquidando al usuario que hizo la reseña, la cual se volvió viral. 

“¿De qué se queja este salame?”, “No tenés paz ni un día”, “¿Se cree que está en Cannes? Seguro de la cumbia con parlantes no se queja”, y “Qué lindo momento cuando aparece la canasta con el muchacho de blanco y buscas el roedor en la remera para levantarle la mano”, fueron algunos de los tantos comentarios.