Google Maps es una de las aplicaciones que los usuarios utilizan para saber cómo llegar a determinados lugares, como así también para revisar los comentarios que otras personas dejan y la calificación. Esta última opción ayuda a que otros potenciales clientes tengan las referencias necesarias para saber si comer en determinado restaurante o no

Los comensales tienen en cuenta los comentarios y las estrellas (calificaciones) que recibió un restaurante en Google Maps, pero a veces estas reseñas son leídas por los dueños de los locales gastronómicos que en ocasiones no se las toman de la mejor manera y responden a las mismas.

Un usuario compartió en Twitter la reseña de una clienta, identificada como Anastacia. "Llevo mucho tiempo en la hostería y no había probado los pokes (ensalada de pescado crudo). Hoy no sabría explicar nuestra experiencia", comenzaba el comentario de la comensal.

"Sólo con decir que ha salido una cucaracha, literalmente, del interior de mi bowl. Ni yo ni nadie de los que iban conmigo hemos podido acabar de comer. Al segundo vemos salir otra del bowl de mi compañera. Hemos acabado comiendo en otro bar de pokes. ¡La higiene por sobre todo chicos! Pongo dos estrellas por el 'buen trato' dentro de todo", decía el comentario de la clienta.

El comentario, como tantos otros, es visible para los futuros clientes, pero también lo son las respuestas que pueda recibir y así fue. El dueño del local donde aparecieron las supuestas cucharadas realizó un descargo en la reseña que dejó la mujer.

"Mirá, a ver si mejoramos esa inventiva que tenemos 4.5 estrellas sobre 5 en las calificaciones de Google", iniciaba la respuesta del propietario del local y siguió: "Para mí que a esta anécdota que cuentas le faltan aliens y le sobran fantasmas".

Pero eso no fue todo, sobre el final resaltó: "A mí me pasa y me hago una selfie con el bicho por lo menos. Preferimos las críticas constructivas que nos ayuden a mejorar". Si bien la reseña es de hace dos meses, la respuesta del cliente es reciente.