Las redes sociales funcionan como espacios para que la gente deposite sus experiencias diarias, sus pensamientos, reflexiones u opiniones sobre algún tema determinado. Estos sitios cuentan con un montón de herramientas que invitan a los usuarios a publicar instantáneamente todo aquello que resulte ser novedoso, llamativo o increíble y que sea motivo para compartir al público.

Es así que todos los días y todo el tiempo podemos ver en las plataformas sociales situaciones desopilantes, apreciaciones personales o mismo experiencias personales de los usuarios o episodios insólitos que le sucedieron a terceros. Más allá del contenido que se publique, lo que es seguro es que si logra ser original o llama la atención de los demás usuarios, una simple publicación puede alcanzar niveles impensados de popularidad al hacerse viral.

En este sentido, la usuaria de Twitter “@saloimar” decidió compartir en su cuenta una situación particular que le tocó vivir con un vecino, cuando le pidió a éste que baje el volumen de la música. La respuesta de él fue totalmente inesperada, por lo que la joven decidió exponerlo en la red social del pajarito y causó revuelo entre los usuarios.

Resulta ser que “@saloimar” publicó en su perfil de Twitter una captura de conversación en donde le pide a su vecino que por favor baje la música porque estaba “en una reunión de trabajo” y el sonido se escuchaba muy fuerte. Su vecino en lugar de apaciguar la situación, le respondió de manera insólita. “Disculpame, ahora la bajo un poco, pero yo estoy trabajando y trabajo con música, nunca antes nadie había reclamado”, le planteó el inquilino. Ante la indignación por la respuesta la joven decidió tuitear la situación y pidió a los usuarios “ideas” para contestarle sin recurrir a las groserías, ya que era “la cuarta vez” que le pedía que bajara el volumen de la música. 

¿Cómo reaccionaron los demás usuarios ante la respuesta del vecino molesto?

Como todo aquello que se viraliza en Twitter por ser original, desopilante o insólito, logra generar la suficiente repercusión, y este fue el caso de la “@saloimar”. Sucede que la conversación que compartió la usuaria recolectó miles de “Me gusta” y cientos de respuestas que dividieron las aguas entre los demás usuarios.

“Dile que qué lástima que sus días de no quejas hayan terminado”, sugirió una usuaria. “Todo el mundo se cag* en las normas de convivencia.”, opinó un usuario. “Estuve en esa un año y medio. Una pesadilla total. Real no tuve solución, solo esperé que se le termine el contrato. Quizás la administración te pueda ayudar”, compartió otra cibernauta.