Tras ir a comer a un restaurante junto a otras tres personas, una periodista mexicana terminó indignada al ver la enorme cifra por la que le estaban cobrando una simple bebida.

Luego de ver el descabellado ticket, en donde figuraba una cuenta total del 4.000 pesos mexicanos -200 dólares-, el enojo de la mujer fue más fuerte que ella, y decidió compartir su queja en las redes sociales. 

No es la primera vez que nos encontramos con una situación de este estilo, en donde los usuarios salen a quejarse públicamente por la mala atención de algún lugar gastronómico, como también hacen pública su indignación tras pagar una altísima cifra.

La cuenta que se hizo viral en Twitter.
La cuenta que se hizo viral en Twitter.

La comunicadora había ido, junto a otros tres chilenos, a disfrutar de una rica comida mexicana en una terraza ubicada en el Zócalo capitalino. Sin embargo, nada salió según lo planeado, ya que terminaron pagando una fortuna.

La terraza que se encuentra frente al Palacio Nacional le cobró unos tacos a 500 pesos mexicanos, los cuales equivalen a 25 dólares, un simple guacamole a 480 pesos mexicanos -24 dólares-, y las limonadas a precios descabellados también.

Tras compartir su fallida experiencia en el restaurante, la mujer denunció que la trataron de "tener cara de turista" por cuestionar los altísimos precios.

Qué dijeron en Twitter

Luego de que la periodista haga pública su experiencia, varios usuarios salieron a respaldarla, confirmando que era cierto lo que decía respecto a aquella terraza. "Siempre te roban cuando vas a ese lugar, por eso no me gusta ir", escribió un internauta, y muchos ex clientes del local opinaron igual que él.

Por otro lado, también hubo quienes etiquetaron a la Profeco - defensa del consumidor- y autoridades del Gobierno mexicano para que se investigue al respecto, ya que consideran que no es legal ofrecer sus servicios a tan elevados precios.

La Terraza, el restaurante de la polémica.
La Terraza, el restaurante de la polémica.

A pesar de que muchos comentaron que también se sintieron estafados luego de ir a comer a ese lugar, lo cierto es que también hubo varios que le echaron la culpa a la periodista. 

En ese sentido, consideraron que tendría que haber chequeado el menú y sus respectivos precios antes de comer ahí. Sin embargo, rápidamente salieron unos pocos a defender a la mujer, señalando que era irresponsable culpar a la víctima en lugar de cuestionar a los establecimientos que se abusan con sus precios y se aprovechan de los clientes.

"Hay muchos lugares en donde en el menú no figuran los precios de cada plato", justificó una internauta, en defensa de la comunicadora social.