Durante 9 años ahorraron el 90 % de sus sueldos y se compraron dos departamentos: ¿Cómo sobrevivieron?
La china Wang Shenai y su esposo tomaron la sacrificada decisión de no gastar dinero, y fruto de esto pudieron llevar a cabo ambas adquisiones, aunque estas acciones son blanco de críticas por parte de las personas en las redes sociales.
Una mezcla de sacrificio y voluntad perseverante de crecimiento hizo que una mujer de 32 años y su marido cambiaran su estilo de vida, ya que decidieron hace casi una década ahorrar el 90 por ciento de su sueldo, y lograron comprarse dos departamentos.
La protagonista de esta historia es Wang Shenai, oriunda de la ciudad china de Nanjing, quien se animó a eliminar de su vida muchas de las cosas de las que la gran mayoría de las persona no estaría dispuesta.
Shenai es miembro de un grupo online de 400.000 personas llamado Frugal Women’s Federation, difunde Gizmodo. En los últimos tiempos, esta mujer se convirtió en una suerte de celebridad debido a sus técnicas extremas para ahorrar dinero, que generaron todo tipo de críticas entre el público.
Durante una larga entrevista en el programa Talk to Her de Tencent, Shenai discutió sus estrategias de ahorro así como sus puntos de vista sobre el consumismo y el minimalismo.
Ahorro. bien de familia
La mujer contó que tiene incorporado el hábito de ahorrar dado que su familia siempre lo hizo por el contexto de pobreza en el que creció. Reveló que su madre siempre ponía el dinero que ahorraba en la heladera, y cuando le daban cambio tiraba las monedas al suelo para enseñarle que el dinero era difícil de conseguir. "Estas primeras experiencias se quedaron conmigo hasta la edad adulta”, remarca.
Tan pronto como pudo conseguir trabajo, Shenai Wang comenzó a ahorrar para su propia casa. Y brinda su punto de vista particular: siempre fue más feliz ahorrando dinero que gastándolo. De hecho compara una "sensación de seguridad" en el primer caso frente a “ansiedad y vulnerabilidad" en el segundo.
Durante los últimos nueve años, ella y su esposo pudieron ahorrar el 90% de sus ingresos mensuales, a pesar de tener que criar a dos hijos. Y así lograron adquirir dos casas en la ciudad relativamente rica de Nanjing, capital de la provincia oriental de Jiangsu.
La pareja lleva a cabo lo que para muchos serían sacrificios extremos, por eso aclara que "no es para cualquiera". Uno apunta a los muebles de su casa: todos son de segunda mano o recogidos de centros o de la calle.
Pero hay más: la mujer asegura no gastar más de 100 yuanes (15 dólares) en ropa interior cada año, solo porque reconoce que "no es una buena idea tener ropa interior usada por otras personas”, afirma. Las demás prendas de vestir son donaciones de amigos que ya no quieren ropa.
Todo gratis, ante todo
La vida social es otro aspecto a tener en cuenta: no tiene si no sale gratis. Ni cenas, ni vacaciones, ni nada que cueste dinero. Además, para movilizarse solo usa transporte público si lo paga con cupones gratuitos que encuentra online.
Un punto central que genera cierta desconfianza es que durante la entrevista jamás cuenta el trabajo y salario de la pareja. Tampoco, cómo se las ingenia para pagar los servicios básicos como la luz y la electricidad.
La mujer se refirió a que un antiguo trabajo en una empresa de publicidad y marketing le sirvió para darse cuenta de cómo las marcas creaban necesidades artificiales para generar una conducta de comprador.
Aunque parezca una contradicción en sí misma, Wang la satisfacción y seguridad que le generan las propiedades que compró. "Creo que es importante que las mujeres compren propiedades. Todas deberían hacerlo. no importa cuán grande o pequeño sea. Cuando una mujer encuentra problemas en la sociedad, su casa es donde puede refugiarse", opina.
Como era de esperar, su entrevista generó todo tipo de comentarios en las redes sociales, en especial críticas por el ahorro extremo, que van desde quienes la califican apenas de "tacaña" hasta quienes señalan que puede "padecer alguna enfermedad mental".
Shenai lejos de enojarse, se limita a explicar que sus actos no lastiman a nadie y que su intención no animar a nadie a seguir su ejemplo, que cada persona debe libre para tomar las decisiones.