Dejó todo y se fue a vivir "el sueño español": terminó volviéndose deportado a la Argentina
Un usuario de TikTok se mostró feliz viajando a Estados Unidos, pero la historia tuvo un giro inesperado y terminó deportado. Conocé más detalles de esta historia, en la nota.
Un usuario de las redes sociales compartió a través de su cuenta de TikTok el feo momento que le toco vivir tras ser deportado en Estados Unidos. La historia comienza muy bien cuando el joven se mostró muy entusiasmado arriba del avión a punto de empezar su gran aventura, pero tomó un giro que nadie esperaba y por supuesto, se volvió viral.
Según contó el chico, esta no era la primera vez que viajaba al país extranjero, sino que ya había vivido por cinco meses allí. Sin embargo, cuando su abuela falleció, quiso volver a Argentina a acompañar a su madre, quien estaba sola. Además, por un tema legal tenía que salir del país por un tiempo.
Fue unos meses después cuando decidió volver a ingresar, pero sus planes no salieron como él espera. En un principio, el joven aventurero estaba ilusionado con viajar nuevamente.
Su familia lo acompañó al aeropuerto para despedirlo y él compartió algunas fotos en el video que se viralizó en la red social china. “Emigrar sale mal”, escribió en la descripción de la primera publicación. Como los usuarios estaban eufóricos esperando más información sobre la historia, Ignacio hizo un ‘story-time’ para hacerle saber a sus seguidores por qué lo expulsaron del país.
“Cuando llegué a la línea de migraciones, me empezaron a hacer las preguntas clásicas”, contó y aseguró que él respondió absolutamente todo: cuánta plata llevaba, si ya había vivido en el país o si era la primera vez y cuánto tiempo se había quedado antes.
Pero el problema llego cuando el personal de seguridad quiso saber si había trabajado en el país y él respondió que no. “Quiso saber cómo hice para mantenerme cinco meses sin trabajo”, contó el joven. Su respuesta fue que “tenía trabajo en Argentina y también un par de cosas más”. Pero esa respuesta no le terminó de cerrar al empleado y le pidió que espere a un costado para luego hacerlo pasar por otro lugar.
Siguiendo con el relato, el chico contó que lo hicieron pasar a un cuarto donde, según él, “hilan más fino” y le hicieron las mismas preguntas. Sin embargo, cuando terminó, la empleada que lo atendió dijo que no le creía absolutamente nada.
En este punto de la historia llego lo más extraño: le pidió el celular y sus contraseñas para investigarlo, con la condición de que si no encontraban nada, lo dejarían pasar. Él accedió y le mostró los comprobantes de sus pasajes y reservas.
Luego, dos policías lo acompañaron a buscar sus valijas, las cuales, por supuesto, fueron revisadas con mucho cuidado. Después le cortaron los cordones de las zapatillas y de la campera y le sacaron su reloj, para luego encerrarlo en la celda del lugar.
Horas más tarde, la chica apareció con el celular y le dijo que no habían encontrado nada, pero por las dudas lo iban a mandar de nuevo a Argentina.
Según relató, Ignacio estuvo detenido hasta las 20 horas y había arribado a las 7 de la mañana a Miami. Obtuvo su libertad cuando alguien vino para decirle que su vuelo estaba por salir. “Los dos policías me acompañaron hasta dentro del avión y le dieron mi pasaporte al piloto”, agregó y luego contó que no se lo devolvieron hasta llegar a destino, o sea, Argentina.