Una vecina del municipio de Redford, Míchigan, Estados Unidos, estuvo a punto de perder la visión tras confundirse y aplicarse en un ojo por error un pegamento instantáneo para uñas, pensando que era un lubricante oftálmico. 

El hecho ocurrió la semana pasada luego de que Yacedrah Williams se quedara dormida con sus lentes de contacto puestas. Tras despertarse cerca de la 1 de la madrugada, la mujer sintió resequedad en los ojos y sacó de su cartera una botellita de aspecto similar a la de sus gotas para la vista, sin advertir que se trataba de un pegamento para uñas que guardaba en el mismo accesorio.

La sustancia surtió efecto de inmediato, y al poco tiempo los párpados de Williams quedaron pegados. La mujer se lavó el ojo con agua fría y urgió a su esposo a llamar a los servicios de emergencia.

Fue trasladada al hospital, donde los doctores lograron retirarle el pegamento y le explicaron que podría haber perdido la visión de no ser por la lente de contacto.

"No dejaban de decirme que probablemente iba a perder mis pestañas, tal y como sucedió, ya que tuvieron que tirar de ellas para dar la vuelta a la parte de arriba de mi párpado", recordó la mujer. Y prometió que jamás volverá a guardar al mismo tiempo pegamento de uñas y lubricante en su bolso.

El oftalmólogo George Williams explicó que la mujer hizo lo correcto al echarse agua el ojo, según consignaron medios locales.

"Si alguna vez le entra algo en el ojo, lo que se debe hacer de inmediato es tratar de enjuagarse el ojo. Sostenga su cabeza bajo el grifo, tome una botella de agua, mantenga el ojo abierto y simplemente y llénelo de agua. Hará un lío [salpicando], pero podrá salvar la vista", expresó el médico.

Y aconsejó a quienes no están seguros de qué tipo de producto están a punto de usar que lean la etiqueta en voz alta y de esa forma podrán evitar cometer un error por no prestar atención.