Fresca, seca, larga, corta, integral… hay infinitas maneras de cocinar y preparar la pasta, que cualquiera puede atreverse a decir que es de las comidas preferidas del mundo. La creatividad para armar platos con ella es infinita, y todas suelen tener éxito en los restaurantes. Llegaron los días de calor y el común denominador pensaría que no es época de pastas, pero la realidad es que todo depende de como se la incorpore. 

La pasta puede ser protagonista tanto de un almuerzo liviano, como sería el caso de una "Pasta Salad", o también para una cena elegante donde se esté antojado de un plato sabroso e intenso junto a un buen vino. De todas las formas posibles, la pasta encaja en cualquier momento del día y no hay estación del año donde se las abandone. Inclusive se la puede comer en casuelas, para llevársela al sillón y maratonear la serie del momento. 

Hoy, según Hola Argentina, te mostramos tres maneras de cocinar la pasta. Querrás incorporarlas en tu rutina diaria y lo mejor de todo es que salen de lo común. La gastronomía evoluciona y la pasta es de las primeras en avanzar. Los clásicos canelones de verdura, los ñoquis con bolognesa o los fideos con tuco quedaron atrás. Para los que no sabian, ya hasta empezaron a ocupar el rol del postre. 

Sopa de espinacas con pasta

Sopa de espinacas con pasta, parmesano y anacardos

Ingredientes

  • 250 g de Coditos de pasta
  • 300 g de Espinacas frescas
  • 1 unidad de Cebolleta
  • 1 diente de Ajo
  • 800 ml de Caldo de verduras
  • 75 g de Anacardos
  • 75 g de Queso parmesano
  • Aceite de oliva virgen
  • Sal
  • Pimienta blanca

Preparación

  1. Lava, limpia bien la cebolleta y pícala finita.
  2. Pela el ajo y pícalo también muy fino.
  3. Echa un poco de aceite en una cazuela y rehoga ligeramente el ajo y la cebolla.
  4. Añade las espinacas y rehógalas un par de minutos.
  5. Cubre con el caldo de verduras, agrega la pasta y cuece durante 10 minutos.
  6. Tuesta los anacardos en una sartén.
  7. Prueba la sopa, salpimenta al gusto y añade los anacardos y unos trocitos de queso parmesano.
  8. Sirve inmediatamente para disfrutarla calentita.

Ensalada caprese de pasta

Ensalada caprese de pasta con albahaca en dos texturas.

Ingredientes

  • 400 g de Lazos de pasta
  • 200 g de Queso mozzarella
  • 12 ud de Tomates cherry
  • 20 hojas de Albahaca
  • Sal
  • Pimienta negra en grano
  • Aceite de oliva virgen extra

Preparación

  1. Pon a cocer los lacitos de pasta el tiempo indicado por el fabricante en agua con sal.
  2. Lava y seca bien las hojas de albahaca. Reserva la mitad para el final.
  3. Fríe la mitad de las hojas de albahaca y sécalas sobre papel absorbente.
  4. Corta la mozzarella en trocitos.
  5. Lava, seca y corta por la mitad los tomates cherry.
  6. En una ensaladera agrega la pasta escurrida, los trozos de mozzarella y los tomates.
  7. Sazona con sal y pimienta y adereza con un poco de aceite de oliva virgen extra.
  8. Sirve en los platos y acompaña con unas hojas de albahaca fresca y otras de albahaca frita.

Raviolis fritos de queso 

Raviolis fritos de queso con salsa de tomate.

Ingredientes

  • 500 g de Raviolis frescos de queso
  • Aceite de oliva
  • Pan rallado
  • 2 Huevos

Preparación

  1. Batir los huevos.
  2. Sacar los raviolis frescos del envase y pasarlos por el huevo y, después, por pan rallado.
  3. Freír en abundante aceite caliente. y escurrir sobre papel de cocinar para retirar el exceso de grasa.
  4. Disponemos en una fuente los raviolis. Acompañamos con una salsa tomate (mejor si es casera) para 'dipear' en ella los raviolis.

Lasagna con crema de castañas

Animate a la versión dulce.

Ingredientes

Para la lasaña

  • 12 ud de Láminas de lasaña precocida
  • 500 ml de Agua
  • 2 cs de Azúcar blanco

Para la crema de castañas

  • 500 g de Castañas
  • 200 g de Azúcar blanco
  • 0.5 l de Leche entera
  • 1 vaina de Vainilla natural
  • 1 ud de Canela en rama

Para el merengue

  • 1 ud de Claras de huevo
  • 50 g de Azúcar glas

Preparación

Para la crema y la lasagna

  1. Ponemos a hervir en un cazo 1 litro de agua.
  2. Metemos las castañas sin cáscara en el agua y escaldamos 5 minutos.
  3. Sacamos del fuego, dejamos enfriar un poco, quitamos la piel pegada al fruto y las ponemos en otro cazo con la leche, el azúcar, la canela y la vaina de vainilla, a la que previamente se le habrá hecho un corte longitudinal para que suelte las semillas.
  4. Cocemos a fuego suave 20 minutos.
  5. Mientras tanto, hidratamos las placas de lasaña en medio litro de agua con 2 cucharadas de azúcar durante 10 minutos y luego las secamos.
  6. Retiramos del fuego las castañas, sacamos la vainilla y la canela, dejamos que se enfríe y batimos todo con una batidora eléctrica hasta obtener una pasta densa.
  7. Metemos la pasta resultante en una manga pastelera con boquilla de estrella.

Para el merengue

  1. En un recipiente limpio y seco, ponemos la clara de huevo, comenzamos a montarla con varillas eléctricas mientras vamos agregando el azúcar glas batiendo hasta que se formen picos.
  2. Metemos el resultado en una manga pastelera con boquilla redonda y hacemos 5 pequeños merengues separados sobre papel de horno, que hornearemos 20-25 minutos a 130ºC.

Acabado y montaje

  1. Montamos 4 ‘lasañas’ siguiendo este procedimiento: ponemos una placa de lasaña sobre un plato, dibujamos líneas de crema de castañas pegadas entre sí en la mitad de su superficie, doblamos la otra mitad sobre el relleno, volvemos a dibujar líneas sobre la superficie resultante y repetimos con dos hojas más, superponiéndolas una encima de otra.
  2. Deshacemos en migas uno de los merengues.
  3. Servimos en platos de postre una ‘lasaña’ por comensal acompañada de un merengue y espolvoreada con las migas.