Sin asado ni vacío: ¿Qué otros cortes de carne sabrosos y baratos se pueden hacer a la parrilla?
Es una carta de presentación de la gastronomía argentina, además de las clásicas empanadas. Al igual que las piezas vacunas más conocidas, otras funcionan muy bien a la hora de prender el fueguito. Mirá cuáles son.
Las gastronomía argentina cuenta con varias cartas de presentación a nivel mundial, como las empanadas o el asado. Este último es un clásico de los domingos juntos a las pastas y es motivo de celebración con familiares o amigos. En la parrilla además de la carne, hay otros alimentos como el pollo, las achuras, los chorizos, la morcilla, una buena provoleta y unas cuentas verduras. En cuanto a los cortes vacunos se pueden seleccionar otros que también son sabrosos y económicos para asar.
Antes de señalar cuáles son estos cortes, hay que tener en cuenta un consejo fundamental para que la carne sea una "manteca" y pidan un aplauso para el asador. Se trata de prestar atención a la elección de la carne, esta debe tener un color brillante, no ser opaca y la grasa debe ser blanca y no amarillenta. Por ello, si tenés un carnicero amigo será de mucha ayuda en la selección de un buen asado.
¿Qué otros cortes de carne se pueden hacer a la parrilla?
No siempre el asado o el vacío son los protagonistas en la parrilla, existen otros cortes de carne que son igual de sabrosos.
1. Tapa de nalga
La tapa de nalga es un corte sin hueso ubicado en cuarto trasero de la vaca. Comúnmente es utilizada para hacer milanesas, pero con un buen adobo (chimichurri u otro) la llevás a la parrilla y tenés una delicia garantizada.
2. Bife ancho a la parrilla
El bife ancho es un corte ubicado en la región dorsal de la vaca y forma parte del cuarto delantero. En una pieza con hueso y versátil para hacer a la parrilla. Es adaptable en cualquier receta, pero su sabor destaca sobre las brasas. En general lo comemos como un churrasco a la plancha.
3. Pechito de cerdo a la parrilla
El pecho o pechito de cerdo es un corte que se obtiene de la panceta, por lo cual, es grasoso. Además viene con hueso y si la grasa no se retira se transforma en un crujiente sabroso en su cocción a la parrilla.
4. Falda parrillera
La falda está por detrás de la tapa de asado, ubicada en la parte baja del pecho de la vaca. Contiene los cartílagos de las terminaciones de cuatro costillas del animal, desde la séptima a la decima. Para elegir este corte hay que tener en cuenta que la carne debe tener un color claro y sin exceso de grasa. Para su cocción es recomendable un buen adobo.