La pasta es elegida por muchos argentinos y argentinas al momento de pensar en una comida con los seres queridos. En este sentido, los ravioles componen uno de los platos más aclamados, pero no siempre se cuenta con el tiempo, las ganas o los elementos necesarios para preparar la receta clásica.

Si bien está la alternativa de comprarlos frescos para cocinarlos en pocos minutos, las ganas de comerlos pueden aparecer de manera repentina y no siempre hay una pastería abierta. Sin embargo, existe una manera muy simple y práctica para elaborarlos en pocos minutos: quedan igual de deliciosos e incluso mejor.

Se pueden preparar con ingredientes disponibles en en el hogar, ya que es probable que muchas familias tengan los elementos necesarios a mano: solo se precisa una masa de tapa de tarta, puesto que se rellenan a gusto y con lo que se encuentre al alcance.

Ingredientes para elaborar ravioles caseros con masa de tarta

Para aproximadamente 12 unidades, los elementos necesarios son:

• 1 masa de tapa de tarta criolla u hojaldrada.
• 3 fetas de jamón.
• 3 fetas de queso.
• 1/2 cebolla.
• 1 diente de ajo.
• 1 lata de tomate.
• Queso rallado.

Ravioles con masa de tarta: modo de preparación

1. Colocar una feta de queso sobre una de jamón y realizar arrolladitos. Cortarlos en tres partes (deben quedar cuadrados) y repetir el procedimiento con el resto de las fetas.
2. Cortarle los bordes a la masa de la tarta para que esta quede de forma cuadrada, y colocar los cuadrados de jamón y queso por encima. La idea es ubicarlos en fila y separados, dejando un borde de masa para poder cerrarlos.
3. Antes de doblar la masa para cerrar los ravioles, pincelar los bordes con un poco de agua. Luego, hacer un poco de presión para que queden bien sellados.

4. Cortarlos para darles forma a los ravioles y presionar un poco los bordes.
5. Preparar una salsa salteando la media cebolla y el ajo, y agregándole la lata de tomate. Condimentar a gusto.
6. Hervir los ravioles y colocarlos en la salsa.
7. Servir con queso rallado.

Esta receta es ideal para los momentos en los que se desea satisfacer el antojo de pasta. Prepararlos lleva alrededor de media hora, y el relleno puede variar en función de los gustos personales y de los ingredientes disponibles en la cocina. Es probable que se vuelva un plato recurrente de muchos cocineros.