Las 5 claves para preparar unos espectaculares chinchulines a la parrilla, una de las "figuras" del asado
A la hora de poner chinchulines al fuego, hay que tener en cuenta ciertos pasos a seguir para que queden perfectos. El paso a paso detallado para la clásica achura, presente en todos los asados.
Si hay algo que no falla en una reunión familiar o en las juntadas con amigos es prender la parrilla y proceder a hacer un buen asado. Siempre hay alguien dispuesto a ponerse la camiseta y comenzar a alistar todo para preparar el menú argentino por excelencia.
Una de las achuras más sabrosas y con mayor popularidad entre el público asadero son los chinchulines. Hay variedad de recetas para prepararlo, están quienes los prefieren más o menos crocantes, con o sin chimichurri, pero es un infaltable en la tabla asadera del domingo. Eso sí: siempre con limón.
Cocinar chinchulines a la parrilla no tiene un alto grado de complejidad, pero sí, implica una serie de instrucciones que tenés que saber antes de ponerlos al fuego. Estos sencillos pasos son claves para facilitar una mejor degustación de la célebre achura.
Ingredientes de chinchulines a la parrilla
- 500 gr. de chinchulines frescos
- 1 diente de ajo
- Ralladura de limón
- Aceite de preferencia (oliva, maíz)
- Sal
- Pimienta
Las 5 claves que tenés que saber para hacer los mejores chinchulines a la parrilla
1. Comprar siempre en una carnicería de confianza y estar atento a su color: tiene que ser brillante y rosa. Esto determinará si está en buen estado o no. No tiene que tener un aroma desagradable y por dentro siempre debe ser marrón claro.
2. La limpieza es esencial antes de su paso por la parrilla. Los aficionados de la carne aseguran que no se debe, bajo ningún término, lavar el interior del chinchulin porque perderá su sabor. Sin embargo, otros prefieren hacerlo. Para esto hay dos simples consignas: dejarlos en remojo algunas horas en agua o leche, y, en caso de querer limpiarlo por dentro, doblar de a poco con ayuda del agua para limpiar con cuidado.
3. Sabemos que la grasa es lo que le da su sabor típico, pero es sumamente necesario retirar la grasa extra.
4. Marinar. Este paso es fundamental si se quiere lograr un buen resultado y que no queden sosos. Dejarlos sumergidos, en lo posible la noche anterior, en una mezcla de ajo, ralladura de limón, aceite, pimienta y un toque de picante en caso de que sea de la preferencia del cocinero. Antes de ir a la parrilla, una buena cantidad de sal gruesa. Esto también permitirá que se desgrase una vez que esté en el fuego.
5. En la parrilla deben estar al menos 30 minutos. Siempre controlando y moderando el fuego. Una vez dorados y crocantes, ya están listos para servir y disfrutar.