No caben dudas que las milanesas son un plato más que popular en Argentina, por su sabor inigualable y su elaboración que depende de cada receta particular. Sin embargo, existe una preparación con un truco especial para que queden más crocantes y sabrosas.

Las milanesas se preparan en filetes de carne (puede ser de vaca, cerdo o pollo), se empanan y se fríen. También pueden ir al horno, y por lo tanto tienen menos calorías y grasa que las fritas.

El proceso de preparación tradicional incluye pasar la carne por huevo batido y harina. Sin embargo, existe una alternativa que deja un resultado más crujiente: pasarlas por leche y rebozarla con polenta.

Preparar las milanesas con polenta, combinado con pan rallado, dejará un resultado más crocante con su capa exterior aireada.

En tanto, utilizar leche y polenta en vez de huevo y harina permite que las milanesas queden más livianas y no tan cargadas de aceites, ya que puede ser malo para la salud como el alto contenido calórico que puede desencadenar en problemas cardiovasculares.

¿Cómo cocinar las milanesas utilizando polenta y leche?

•Preparación de la carne: en caso de utilizar carne vacuna o cerdo, se deberá cortarla en filetes delgados. Con la opción pollo, usar pechugas enteras o cortarlas en filetes. Aplanar los filetes con un mazo de cocina para que queden más delgados y tiernos.

•Adobar la carne con sal y pimienta al gusto. Se puede agregar otras especias como ajo, orégano o perejil.

•Para el rebozado: en un plato colocar el pan rallado junto con la polenta, mezclado en partes iguales.

•Otra alternativa para reemplazar el huevo es la leche, para que el pan rallado y la polenta quede adherida a la carne sin que se caiga.

•Luego de bañar la carne en leche, cubrir bien la carne en polenta y pan rallado y sacudir el exceso. Hay que presionarlo ligeramente para que se adhiera bien.

•Calentar suficiente aceite en una sartén a fuego medio-alto. Una vez caliente, colocar las milanesas en la sartén (no sobrecargues la sartén; fríe en tandas si es necesario). Cocina por unos 3-4 minutos de cada lado, o hasta que estén doradas y crujientes.