Juan Gómez comenzó a trabajar como electricista a los 16 años decidió a que no alcanzaba la plata en su casa, donde vivía con su mamá y hermana.
Después de muchos años de trabajo, el electricista se anotó en los FINES para terminar el secundario y se matriculó como profesional.
A pesar de que el juego no fue fácil, supero los distintos niveles y se quedó con 3 millones de pesos, sin embargo, confesó que los usaría para poder dar cursos gratuitos de electricidad en el barrio.